Los hermanos vuelven a juntarse entre fogones para el envío de comida a domicilio
01 may 2020 . Actualizado a las 23:01 h.Ana y Borja Portals están acostumbrados a batallar juntos entre fogones. Los hermanos ya trabajaron codo con codo haciendo famosos los arroces de A Curtidoría, hasta que sus proyectos individuales los llevaron por diferentes caminos. «Sempre colaboramos, pero dunha forma tan práctica como a de agora fará seis ou sete anos que non o facemos», señala ella, quien hace poco trasladó su restaurante, Solleiros, al antiguo Hotel Suizo, en Mazarelos. El coronavirus les dio una excusa para juntarse de nuevo y han vuelto a la acción para ampliar la oferta en el servicio a domicilio. A falta de uno, ellos colaborarán en tres proyectos para tiempos de confinamiento.
¿En qué momento decidieron retomar el trabajo y hacerlo juntos? «Cando respiramos que isto do illamento ía para largo. Á xente estáselle pasando esa ansia inicial que houbo de facer pan e biscoitos. Moitos xa están fartos de cociñar a estas alturas e nós non faciamos nada metidos na casa», contesta Ana Portals.
«Aunque ya estábamos en Glovo, en un primer momento cerramos A Curtidoría porque entendimos que tocaba quedarse en casa. Sin embargo, estas últimas semanas nos han contactado muchos clientes para preguntarnos por qué no llevábamos la comida a domicilio. Nos decían que ya llevaban muchas semanas sin demasiadas alternativas y que echaban de menos nuestra cocina», añade Borja Portals.
«Para nosotros es como un nuevo reto, y nos apetecía afrontarlo juntos, como desde nuestros orígenes», subrayan unos hermanos a los que unen lazos de sangre y también los de la hostelería.
La carta de A Curtidoría volvía a ponerse al alcance de los amantes del arroz la semana pasada. Y en unos días también se podrá disfrutar de la cocina tradicional con toque personal de Solleiros. «O maior reto foi adaptar a carta ás circunstancias. Os arroces non teñen tanto problema para levalos a domicilio, pero si tiñamos no menú de Solleiros cousas moi coidadas que tal e como se facían non eran as máis axeitadas para levar ás casas», incide la cocinera. Eso sí, Ana avanza que no faltarán sus guisos ni su «empanada de millo», un emblema de Solleiros que incorporaron temporalmente a la carta de A Curtidoría.
«Chegáronnos estes días pedidos de empanadas dende A Illa de Arousa, Madrid ou Almería. Foron cinco para a capital e outra para Andalucía», comenta Ana Portals. ¿La acogida entre el público de Santiago? «Estamos encantados coa resposta da xente. Entre semana, facemos servizos nas comidas e trabállase ben, pero a fin de semana estamos a tope. Venres e sábado tamén se fan cenas, e a xente pide máis, pero o domingo segue a ser o día estrela», apostilla.
Tacos y poke hawaiano
El tercer proyecto de los hermanos Portals, gestado en medio del estado de alarma, es Lupita Taquería, y esperan ponerlo en marcha de cara a la próxima semana. No solo ofrecerán tacos, sino «otros platos de la cocina mexicana que son ideales para comidas o cenas informales», apunta Borja.
El propietario de A Curtidoría destaca que su restaurante ofrecerá a través de plataformas de reparto como Glovo o Just Eat algunos entrantes y ha incorporado a la carta varias opciones de poke, un plato típico de Hawái que surgió de la necesidad de los pescadores de poder comer algo rápido mientras trabajaban en el mar, elaborándolo con lo que tenían a mano, como pequeños trozos de pescados crudos marinados con algas, nuez de la India... «Está muy de moda en todo el mundo porque es un plato único muy completo y sano», señala, y su restaurante ofrecerá versiones que van desde el pollo o el salmón, y hasta una alternativa vegana.