El Concello da orden de continuidad a 30 contratos con más de 515 empleados

r.m. SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

PACO RODRÍGUEZ

La medida garantiza el empleo y servicios aun con las limitaciones del estado de alarma

03 abr 2020 . Actualizado a las 18:29 h.

El Ayuntamiento ha dado orden de continuidad de servicios a una treintena de empresas concesionarias desde que se decretó el estado de alarma. Aunque en buena medida el nivel de prestaciones se ha visto alterado por las restricciones de la crisis sanitaria, el Concello ha mantenido los contratos con sus condiciones iniciales, aunque con la introducción durante este período de los protocolos de prevención de riesgos laborales que imponen las restricciones de movimiento.

Ello implica la conversión del trabajo en teletrabajo donde sea posible, y la organización del personal y el mantenimiento de unas prestaciones mínimas en aquellos servicios que exijan atención presencial. El resto del personal y de los medios vinculados a esos contratos estarán a disposición del Ayuntamiento para «facer fronte a calqueira necesidade que poida xurdir», afirma la concejala de Facenda, Marta Abal.

Menos carga de trabajo

En estas circunstancias hay servicios cuya carga se ha reducido de forma muy notable, al quedar paralizada la actividad objeto de su prestación, como, por ejemplo, los de conserjería y limpieza en los colegios públicos y el de vigilancia y limpieza también de los polideportivos municipales. Su funcionamiento, sin embargo, garantiza su vigilancia y continuidad en el aseo de las instalaciones, pudiendo aprovecharse incluso para afrontar limpiezas y desinfecciones más a fondo.

Detrás de estas órdenes de continuidad a los contratos de prestación periódica está el mantenimiento de los servicios, aunque sea con limitaciones. Pero, sobre todo, el interés por que se mantengan los puestos de trabajo vinculados a los servicios externos municipales, aunque no gratuitamente, observa Abal. «Estamos vendo como se traballa e cada factura virá xustificada», dice la edila, sin descartar compensaciones futuras si hubiese lugar. Aunque es más laborioso, Raxoi decidió afrontar estas autorizaciones de forma individualizada, para mayor garantía.

Solo 18 de esos contratos aportan 515 trabajadores. Pero son más, porque hay servicios de mantenimiento donde la asignación de personal es a demanda. Y no está contabilizado tampoco el contrato del transporte urbano, con orden de continuidad, aunque desde el lunes funciona solo al 32 %.

Además de los básicos, entre estos servicios están ayuda en el hogar, senalización viaria, la gestión de las guarderías municipales y la Escola de Música y mantenimiento de los campos de fútbol y los ascensores de los centros socioculturales. En cuanto a la programación de estos últimos, el Concello está en conversaciones con Ferrovial también para su mantenimiento, teniendo en cuenta que puede haber alternativas interesantes por Internet. Las guarderías y la Escola de Música están haciendo «un traballo impresionante a través da Rede», dice Abal.

Sin gestión de multas

Hay tres contratos, sin embargo, suspendidos a petición de las empresas. El de comedores escolares, la actualización del catastro y la gestión de multas de tráfico. Este, solo para labores administrativas: los radares siguen funcionando y la gestión se retomará cuando se levante el estado de alarma. Los posibles infractores habrán de tener en cuenta que la Administración dispone de tres meses para notificar las faltas leves, y de seis para las graves.