La grúa deja unos 15.000 euros de pérdidas al mes que compensarán los nuevos vehículos con cámaras

r.m. SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

PACO RODRÍGUEZ

El Concello estudia fórmulas para revertir un déficit que procede de la merma progresiva de la retirada de coches de las calles

11 feb 2020 . Actualizado a las 23:25 h.

La actividad de la grúa sigue cayendo y lo notan los números con los que Tussa ha de hacer frente al servicio, que se presta en conjunto con el de la ORA. Si esta última se mantiene «máis ou menos», la grúa está arrojando pérdidas mensuales próximas a los 15.000 euros. El Concello está estudiando fórmulas para revertir un déficit que procede de la merma progresiva de la actividad de retirada de vehículos de las vías públicas. Una pérdida que resulta notable con respecto a hace una década, porque si ahora se está en torno a los 4.000 al año, hace 12 años superaba los 10.000. Entonces, la doble fila, «agora menos intensa», alimentaba en buena medida esa actividad.

El dato lo aportaba ayer el alcalde, que no desecha el efecto de la «mellora da circulación» en la caída de la ocupación del servicio. Ese déficit se compensaría con otro tipo de vigilancia vinculada con la movilidad: la de la ocupación incorrecta del espacio público a través de vehículos dotados con cámaras. Hacia finales de este semestre comenzarán a funcionar dos equipados con cuatro cámaras cada uno para vigilar el aparcamiento en áreas de residentes y en zonas de estancia limitada. Las cámaras irán captando las matrículas para confirmar si están ocupando ese espacio de forma irregular y contrastar, en sucesivas rondas, los tiempos de uso en zonas con límite horario. Esos vehículos los conducirán operarios ahora destinados al servicio de grúa.