Los continuos golpes de vehículos de reparto volvieron a alterar unas estructuras reparadas hace siete años
11 feb 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Las fuentes de O Toural, Praterías y Cervantes no pasan por su mejor momento. Su deficiente estado de conservación queda patente en la gran cantidad de agua que pierden todos los días y que termina corriendo por las plazas. Los daños en la estructura de la de O Toural son, en apariencia, los más llamativos, aunque las tres están muy deterioradas.
En la de O Toural, hay sillares que están desplazados hacia el interior en uno de sus laterales, y en todo el vaso es fácil localizar los puntos en los que la cal que sella las piedras para evitar la fuga de agua ha desaparecido. Fuentes técnicas consultadas aseguran que el mal estado de esa estructura es consecuencia de los golpes continuos de los vehículos de reparto contra el sillar. La de O Toural fue una de las siete que se arreglaron en el 2013, con un presupuesto de 93.000 euros que financió el Consorcio. Unos meses después de aquella restauración, que supuso desmontar todo el vaso y reparar las conducciones del agua, fue necesario volver a intervenir, porque el sillar se movió nuevamente al ser golpeado. La concejala de Urbanismo, Mercedes Rosón, señala que se está redactando un proyecto para reparar los daños. También se está preparando otro proyecto para la fuente Cervantes, porque está igualmente dañada. Rosón indica que son las dos que se encuentran en peor estado, y de ahí que el Consorcio vuelva a intervenir en ellas.
La de Cervantes, que no estaba incluida en el proyecto del 2013, también tiene pérdidas de agua que inundan la plaza. La explicación técnica es idéntica a la de O Toural. La cal hidráulica saltó por el efecto de los continuos golpes. Ese material se endurece con el paso del tiempo, pero se rompe cuando se golpea. Es el caso de la fuente de Fonseca, una de las que fueron restauradas hace siete años, que al estar aislada del tráfico no sufre los mismos daños.
La fuente de Praterías, que por ahora no forma parte de la relación de las que serán restauradas, requiere a los ojos de los expertos una intervención urgente, por tratarse de una pieza de alto valor patrimonial. A simple vista, el agua sale del vaso por varias rendijas del sillar de piedra. Además, el estado de las esculturas alerta de la necesidad de una limpieza a fondo, y los caños y la estrella superior precisan de reparaciones para recuperar su esplendor. El proyecto elaborado por el Consorcio para esta fuente en el 2013 cifró en 100.000 euros el presupuesto para su rehabilitación.