Santiago cerró 2019 con 44 atropellos, un gran dato pese a la mala tónica final

Hasta mediados de noviembre, Santiago iba camino de lograr un dato inmejorable en lo que a atropellos se refiere. Se había producido uno cada 9,6 días, un ritmo que habría permitido cerrar el 2019 con tan solo 38 accidentes de este tipo, muy por debajo de todos los ejercicios anteriores, en los que la media fue de 55. Esa magnífica tendencia cambió bruscamente en el último mes y medio del año, en el que la cifra se disparó con un registro total de once peatones arrollados, nada menos que uno cada 4,18 días. Esa mala tónica final ha dejado en 44 el número de atropellos en el año recién cerrado, lo que pese a todo supone el mejor dato desde el 2012.

Esos 44 atropellos del 2019 están muy por debajo de la media -que al incluir este buen dato baja ahora a 53,75- y está lejos de ejercicios mucho más complicados, como el 2012, con 69 accidentes de este tipo, o el 2017, cuando hubo 67 e hizo que el Concello tomase medidas drásticas en la mejora de la señalización y la reforma de vías peligrosas, lo que posibilitó que en el 2018 la cifra de arrollamientos bajase a 46, solo uno más que los 45 del 2016, que hasta ese momento eran los mejores años de la serie histórica, que se completaba con los 53 del 2013, los 55 del 2014 y los 51 del 2015.

El balance, por tanto, que se hace desde el gobierno local es una mezcla de satisfacción y preocupación. Los 44 atropellos del 2019 -uno cada 8,3 días- no solo son el mejor registro de los últimos ocho años, sino que también confirman la buena tendencia que ya marcó el 2018. Pero esos once peatones arrollados en solo 46 días han hecho que el propio alcalde, Xosé Sánchez Bugallo (PSdeG-PSOE) tome nota y haya encargado al concejal de Seguridade Cidadá, Gonzalo Muíños, que estudie posibles medidas. Entre ellas, la que el propio regidor ha planteado es rebajar a 20 kilómetros por hora el límite de velocidad en algunas zonas de la ciudad. Entre ellas, el Ensanche.

El mal comportamiento de los atropellos en el último mes y medio del 2019 es evidente si se tiene en cuenta que en esos 46 días, que suponen el 12,6 % de todo el ejercicio, se concentraron nada menos que el 25 % de los siniestros. Por fortuna, ninguno de ellos tuvo como consecuencia víctimas mortales, aunque sí heridos de gravedad, como el que hubo que lamentar en el último arrollamiento del año, que tuvo lugar el 30 de diciembre a las 12.15 horas. Fue en un paso de peatones de la avenida de Castelao y el lesionado fue un hombre de 75 años de edad.

Esta es una de las vías que en los últimos años se mostró como muy peligrosa, lo que motivó que el anterior edil de Seguridade Cidadá, Xan Duro (Compostela Aberta), tras el informe de la Policía Local, tomase la determinación de modificarla por completo. Se colocaron cojines berlineses para obligar a los coches a reducir la velocidad, se mejoró la señalización de los pasos de cebra y se eliminó un carril en la subida para evitar adelantamientos y maniobras peligrosas. Desde entonces, el número de incidentes se ha reducido, así como su gravedad.

Con la llegada del nuevo gobierno socialista, ese plan sigue adelante y se han tomado medidas en el Ensanche para dar prioridad a los peatones e instalando cojines berlineses. Ahora se están planteando colocar señales en los pasos de cebra que sirvan para evitar los despistes de los transeúntes que van absortos mirando el móvil.

69

2012

El peor dato de la serie histórica casi se repite en 2017

53,7

Media

El buen dato del 2019 rebaja la media, que era de 55

33

Hasta noviembre

Atropellos que se habían registrado hasta el día 15

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