Raxoi traslada al ADIF su demanda de reforzar el proyecto de la estación

La Voz SANTIAGO / LA VOZ

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PACO RODRÍGUEZ

Alega la necesidad de incorporar un párking y de cubrir el andén en mayor medida

18 nov 2019 . Actualizado a las 23:20 h.

La segunda fase de la reforma de la estación de tren vinculada a su adaptación para la alta velocidad no convence al actual gobierno municipal. Al margen de considerar que la de Santiago no será una auténtica estación intermodal, sino una terminal mejorada -una vez perdida la ocasión de ejecutar el proyecto de Juan Herreros seleccionado en el concurso del 2011-, Sánchez Bugallo no está del todo de acuerdo con el proyecto en el que trabaja el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF). Para el regidor, su propuesta se queda coja sin la proyección de un aparcamiento subterráneo y sin una estructura que cubra la playa de vías más allá de lo que lo hace la actual marquesina.

La intermodal no puede afrontar las necesidades de movilidad que generará su actividad con el volumen de estacionamiento del que dispone ahora mismo en superficie, entiende el Concello. Y por ahí va una de sus demandas para reforzar el proyecto que el ADIF ha sacado a exposición pública. El organismo dependiente del Ministerio de Fomento ya la conoce, pero Raxoi la ha hecho oficial a través de la formulación de propuestas al proyecto en ese período de exposición y presentación de alegaciones.

Con el Xacobeo a la vista y la intención de que las obras que se puedan desarrollar hasta entonces no entorpezcan la actividad de la terminal, es difícil pensar en que un aparcamiento que ahora mismo no está contemplado se pueda asumir ya. Bugallo no renuncia a que se introduzca en el proyecto que se está ultimando, pero, en cualquier caso, reclama que, si no es ahora, sí contemple su contrucción en el futuro. En las mismas está el gobierno municipal con la exigencia de una cubierta para la playa de vías. En una ciudad con la climatología de Santiago y con la reforma que tiene pendiente la estación, entiende que no es de recibo que no se contemple techar el espacio de los andenes por el que se han de mover los pasajeros del AVE. Ese espacio será mayor en longitud del que preserva la marquesina actual.

Esa es la segunda demanda que el Ayuntamiento ha oficializado en el período de exposición al público. Y en este caso el calendario no parece una excusa. Es una intervención que se puede ejecutar al tiempo que se acometen otras obras en la terminal, expone el regidor.

Pero la cuestión más determinante para que, una vez aprobado el proyecto, se pueda afrontar de inmediato esa segunda fase de la reforma para la llegada del AVE está en el propio convenio suscrito entre las Administraciones central, autonómica y local para el desarrollo de la estación intermodal (la localización en un mismo ámbito de las terminales del transporte por ferrocarril y de autobuses). Y esa no es otra que la eliminación de la cláusula que exige llegar a los 3,5 millones de pasajeros.

Esa decisión, dicen en Raxoi, ya no le corresponde al ADIF, sino al Gobierno, y aunque en Madrid han mostrado disponibilidad para excluir esa cláusula, la interinidad en que ha estado el Ejecutivo hasta ahora, y la prolongación de esta hasta que se conforme uno nuevo, no facilitan esa decisión. No es la única que está pendiente de lo que acontece en Madrid desde las elecciones de mayo: el orbital sigue esperando por su licitación, pese a que el Gobierno de Sánchez le dio el visto bueno en abril. Otras esperan desde bastante más atrás, afectadas por la estela del procés, como la reunión del Real Patronato para activar la programación de los próximos años. Esa reunión requiere compaginar la agenda del rey, el presidente y varios ministros.

El organismo de Fomento recurrirá la sentencia sobre el viaducto de Pontepedriña

El ADIF recurrirá la sentencia que rechazó el recurso en el que exigía al Concello el pago de casi 7 millones (12 con intereses) por el coste del viaducto de Pontepedriña alegando que Raxoi había incumplido de forma deliberada el convenio de 1998 que permitía a esa entidad desarrollar usos lucrativos en el área de Renfe. Esa es su intención, según la propia entidad, que ya trasladó al Concello el anuncio de que mantiene esa vía abierta.

El fallo judicial no dirimía la reclamación monetaria (aunque sí determinaba que en el caso de proceder una indemnización no se basaría en el coste de la infraestructura) y apuntaba que el cauce judicial no era el adecuado. No al menos antes de reunir a la comisión de seguimiento del convenio, el órgano que debería ver en primera instancia esa reclamación. Pero el ADIF, al que el Concello contraargumentó con «graves» incumplimientos del mismo convenio por su parte, no solicitó previamente su reunión. Tampoco lo ha hecho desde el conocimiento del fallo judicial, según fuentes de Raxoi.