El alcalde no ve garantizados la totalidad de los fondos europeos para la depuradora

El alcalde de Santiago matizó ayer que la situación de los trámites de las obras de ampliación de la depuradora de Silvouta «non é a mellor posible». Sánchez Bugallo concluyó que ahora no se puede garantizar la preservación total de la subvención de la Unión Europea, tras las reuniones con el Ministerio de Medio Ambiente, la Consellería de Infraestruturas y la dirección de la empresa estatal Acuaes.

El Plan Feder aporta 32 millones de euros en el proyecto de 2014-2020, tras la reducción desde los 38,5 millones del 2007-2013. Para que el Concello de Santiago pueda optar a esa ayuda, las nueve empresas que se presentaron al procedimiento de concurrencia competitiva deben exponer sus propuestas técnicas el 30 de septiembre. De esta manera, se podrán seleccionar los cuatro mejores proyectos antes del verano del 2020. Además, el procedimiento de autorización medioambiental deberá ser abreviado. Este trámite no se puede resolver hasta que se tengan los proyectos técnicos, es decir, el próximo año. Siguiendo este procedimiento, se podrían empezar los trabajos en el 2022. Esta es la conclusión que ha sacado el alcalde tras su encuentro del pasado miércoles con el secretario de Estado de Medio Ambiente en funciones, Hugo Morán.

En cambio, las últimas declaraciones de Bugallo, ayer, indican que «empezando as obras no ano 2022, que é o obxectivo marcado, poderemos aproveitar a parte proporcional da subvención correspondente aos traballos que sexan posibles de executar no bienio 2022-2023». El alcalde declara como «moi difícil» que esa parte proporcional complete los 32 millones de euros de la UE. Aun así, Bugallo admitió que «imos facer todos os esforzos que estean na nosa man para preservar os fondos europeos». Sin adoptar el procedimiento alternativo simplificado, las obras de la depuradora de Silvouta no se podrían empezar antes del año 2024 y el Concello estaría fuera de los límites del actual plan de ayudas.

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