El servicio de limpieza es insuficiente para combatir la suciedad en Santiago

La Voz SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

XOAN A. SOLER

CA no fue capaz de licitar el contrato, que deberá incluir importantes mejoras

10 jun 2019 . Actualizado a las 19:14 h.

Una de las constantes de los cuatro años de mandato de Compostela Aberta ha sido el debate público y la crítica a los problemas de limpieza que ha arrastrado la ciudad. Los vecinos de Santiago soportan desde hace tiempo un servicio que se ha quedado insuficiente para atender las necesidades, ya sean del rural, de los barrios, del Ensanche o del casco histórico. En este último se han localizado las críticas más intensas, debido a que su estado de revista no es el propio de una ciudad monumental patrimonio de la humanidad.

El constante crecimiento de la afluencia de turistas y, en consecuencia, de la actividad hostelera junto a la mayor demanda de los propios vecinos, ha superado con creces al servicio de limpieza y recogida de basuras, sobre todo en la almendra monumental.

Compostela Aberta ha tenido la ocasión de impulsar un salto adelante coincidiendo con el vencimiento del contrato, que aun siendo el más voluminoso entre los servicios municipales concesionados por su dotación económica -doce millones, incluyendo el tratamiento de los residuos- se ha quedado corto para las necesidades de la capital. No obstante, CA ha concluido el mandato con el vigente contrato en su último año de prórroga, tras haber estimado que saldría a licitación a finales del 2017 o principios del 2018. Actualmente el pliego está redactado, y el ejecutivo de Noriega lo sometió recientemente a información de las empresas que pudieran estar interesadas.

Pero este proceso no va a seguir adelante sin la revisión propia del cambio en la alcaldía. Xosé Sánchez Bugallo analizará en detalle el pliego, que introduce cambios importantes en el modelo, como la apuesta por el compostaje. Este es uno de los aspectos que querrá contrastar el gobierno socialista, que también se declara a favor del compostaje, pero con un modelo que sea económicamente viable.

Lo que le van a pedir los colectivos ciudadanos al nuevo alcalde es diálogo para introducir mejoras en el servicio. Así lo indican los representantes del sector de la hostelería y del comercio del casco histórico. Para los primeros, es imprescindible que el servicio derivado del nuevo contrato dé respuesta a las distintas necesidades de vecinos, hosteleros y comerciantes, lo que exigirá una regulación horaria a la medida de las características de la actividad por zonas de la ciudad monumental, explica Hostelería Compostela. Esto requerirá necesariamente más personal y, por tanto, un coste mayor. No obstante, este colectivo estima que la situación ha evolucionado en positivo, en parte por la introducción de mejoras en el servicio y en parte por una mayor concienciación de los hosteleros. La asociación de comerciantes y profesionales Compostela Monumental cree que «Bugallo lo tiene fácil, porque peor no se pudo hacer», y ve dos acciones para mejorar la situación: diálogo con todos los agentes implicados y reforzar el servicio de recogida en los distintos horarios.