La población mayor de 64 años ya quintuplica en Compostela a la de menores de 5

Mario Beramendi Álvarez
mario beramendi SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

PACO RODRÍGUEZ

La edad media en la ciudad se sitúa en 45,1 años, por debajo del promedio gallego, según los últimos datos del IGE

04 may 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Tal vez sea el mayor desafío al que se enfrenta la sociedad gallega: el galopante envejecimiento poblacional. Y sin embargo, se trata de un asunto que no ocupa el lugar que debiera en la agenda pública. El declive demográfico sacude con mayor intensidad a la Galicia rural, pero también a las ciudades del llamado eje atlántico. La última radiografía elaborada por el Instituto Galego de Estatística (IGE) sobre las grandes ciudades (Panorama dos sete grandes concellos) vuelve a encender todas las luces rojas en materia de población. Y eso que Santiago no es el municipio más envejecido.

Con todo, hay datos que trazan un panorama desalentador. Por ejemplo, el porcentaje de censados por encima de los 64 años (el 21,2 % de una población de 96.405) es cuatro puntos superior al de personas por debajo de los 20. Suman, en total, 20.437, una cifra que es cinco veces superior al número de santiagueses que tienen menos de cinco años (4.219). La edad media en el conjunto de Galicia son 47 años, aunque en Compostela baja hasta los 45,1. Tal y como precisan desde el IGE, el índice de envejecimiento mide la relación entre la población mayor de 64 años y la población menor de 20 años. En Galicia, en el año 2018, toma el valor 156,4, lo que quiere decir que, por cada 100 menores de 20 años hay aproximadamente 156 personas de 65 o más años. Los siete grandes municipios presentan valores más bajos en este indicador que el promedio, excepto Ferrol, que con un índice de 185,3 supera al gallego. En el caso del ayuntamiento compostelano se sitúa en 125,2.

El índice de envejecimiento más bajo lo tiene Pontevedra, donde la relación es de 103,5. En los siete grandes ayuntamientos el indicador está por encima del 100%, lo que significa que en todos hay más población mayor de 64 años que menor de 20. En Santiago, por ejemplo, hay 18.781 pensionistas, en su inmensa mayoría por encima de los 65 años, lo que quiere decir que uno de cada cinco habitantes de Compostela es un jubilado. Esta cifra es casi un 13 % superior a la contabilizada antes de que estallara lo peor de la crisis, en el año 2011. Y en este municipio, como en Galicia, empeora la proporción entre las personas que viven del sistema con prestaciones públicas y los ciudadanos que contribuyen con sus recursos a poder financiar las políticas públicas.