El Auditorio cierra un mes la sala Brage para cambiar las butacas

Montse García Iglesias
Montse garcía SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

cedida

Reabre el 24 de enero con la Filharmonía y mantendrá el aforo

25 dic 2018 . Actualizado a las 18:41 h.

Las butacas que durante casi treinta años -los cumplirán el 30 de octubre- acogieron al público de la sala Ángel Brage del Auditorio de Galicia se despidieron este sábado en las actividades de la Festa do Apego. El miércoles comenzarán los trabajos de sustitución por unas nuevas. Será un mes sin actividad ya que los nuevos asientos se estrenarán el 24 de enero con un concierto de la Real Filharmonía de Galicia.

Precisamente, el calendario de los trabajos para renovar las butacas se fijó teniendo en cuenta la programación de la orquesta, con las dos próximas citas fuera de su sede. El concierto de Reyes, el día 4 de enero, lo ofrecerá en el Teatro Principal y, después, el 17, se desplazará hasta la Cidade da Cultura para ofrecer un programa especial con motivo de la exposición Castelao maxistral. «O impacto na actividade da sala é o mínimo posible e é unha actuación que vai mellorar a confortabilidade dos asistentes», aseguró el director-gerente del Auditorio, Xaquín López.

La renovación de las butacas será acometida por la empresa Sociedad Cooperativa Obrera Ezcaray, que presentó una oferta por valor de 272.957,40 euros en el concurso público, que contó con la participación de otras tres firmas aspirantes.

El aforo será prácticamente el mismo que el actual -solo se redujo en dos- quedando en 996 butacas, diez de ellas para personas con movilidad reducida. Además, algunas de ellas también tendrán características especiales para facilitar el acceso a ellas de personas con dificultades. Según destacó Xaquín López, los nuevos asientos son de la misma gama cromática que los actuales, aunque con el respaldo más alto y más anchos. «Intentamos respectar moito os materiais e a estética orixinal», precisó el director-gerente del Auditorio, añadiendo que serán de madera, al igual que las utilizadas a lo largo de estas tres décadas, puesto que es una cuestión que incide en la propia acústica de la sala, una de las mejores de Galicia. También habrá cambios en el tapizado, elaborado con telas en las que el impacto de las manchas es menor.