Reyes afirma que el ADIF solo ganó con la construcción del viaducto de Cornes
SANTIAGO
«Eu non acabo de ver as perdas» cuando «revalorizou» sus propiedades en esa zona
29 nov 2018 . Actualizado a las 05:00 h.El PSOE cuestionó ayer la intención del ADIF de revertir sobre la ciudad el coste del viaducto de Cornes, construido hace más de 15 años y que permitió eliminar el talud que separaba esa zona y Pontepedriña. Más allá de los planteamientos jurídicos con los que Raxoi se enfrenta a una demanda de casi siete millones, Paco Reyes no ve pérdida por parte del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias: «Non a acabo de ver, ¡se só gañou!».
Ganó, dice el portavoz del PSOE, con la revalorización de los terrenos de su propiedad en los suelos de Pontepedriña y Cornes cuyo desarrollo urbanístico se vio favorecido con el viaducto. Pero también con la licitación por parte del organismo de Fomento de parcelas de su propiedad en Cornes sin tener en cuenta el compromiso de destinarlas mayoritariamente a vivienda de protección oficial (precio tasado), como aduce el gobierno de CA en su contestación a la demanda.
Hasta un mínimo del 82 % debía ser para ese tipo de vivienda -el resto podrían ser libres-, según el convenio por el que el Concello y la entonces unidad de Patrimonio y Urbanismo de Renfe concertaron la proyección del viaducto. Pero no fue así y acabaron siendo libres, afirma Reyes, pero también el Concello en la contraposición de argumentos al ADIF. «Por unha desas poxas sacaron máis de dous millóns de euros», con lo que «non acabo de entender onde está a perda do ADIF», afirma el socialista, quien precisa que además el Concello ha tenido que asumir la expropiación de terrenos de ese organismo en el área de Renfe para el desarrollo de infraestructuras vinculadas con la implantación de la alta velocidad y la intermodalidad.
Sorprendido de que esta demanda haya llegado «vinte anos despois do convenio», y cuando ya se va por el tercer acuerdo para el desarrollo del área de Renfe, el socialista se pregunta «a que vén esta política», aunque en este caso no solo ha reparado en la actitud del ADIF cuando el mismo «non cumpriu unha parte do convenio». También en la del alcalde cuando cuestiona el impacto actual en las cuentas municipales de «erros do pasado». El convenio se firmó con un gobierno socialista. «Comprendo que estamos en campaña, pero hai que ser serios con estas cousas» y hablar «do bo e do malo das herdanzas», porque el gobierno de Noriega «ten agora mesmo pleitos que poden ser millonarios», como el de la ORA; «e hai que pensar tamén na Escola de Música», dice Paco Reyes.