La Xunta defiende As Pontes y Meirama como pilares de una energía competitiva

Juan María Capeáns Garrido
Juan Capeáns LA VOZ

SANTIAGO

Reunión de Francisco Conde con representantes de empresas electrointensivas
Reunión de Francisco Conde con representantes de empresas electrointensivas CONCHI PAZ

Crea una mesa de trabajo con las empresas electrointensivas para demandar soluciones de urgencia para Alcoa y el sector

20 nov 2018 . Actualizado a las 15:05 h.

El conselleiro de Economía no solo cree que el Gobierno español debería ser más sensible con la importancia industrial y laboral de centrales como las de Meirama y As Pontes, sino que considera que, debidamente ajustadas a las exigencias ecológicas, pueden ser un pilar básico para poder ofrecer costes energéticos competitivos ahora y en el futuro. Francisco Conde reunió esta mañana en la sede administrativa de la Xunta a representantes de empresas electrointensivas (Alcoa, Ence, Megasa, Ence, Celsa, Finsa, Intasa, Showa y Benko) para impulsar un grupo de trabajo en clave gallega que tome la iniciativa y aporte soluciones al conflicto más latente, el de Alcoa, pero también para abordar una propuesta de marco energético con un horizonte de al menos un lustro. Conde busca un «diálogo fluido» con el tejido industrial de la comunidad para presentar propuestas al Gobierno central que, a juicio del titular de Economía, está ofreciendo una puja de interrumpibilidad que no encaja para las empresas más demandantes. 

Esas medidas urgentes con la vista puesta en Alcoa serán trasladadas mañana en Madrid al Ejecutivo, pero el conselleiro también valoró el futuro a medio y largo plazo de las centrales de Meirama y As Pontes. En ese sentido, la Xunta defiende una transición energética «ordeada» hasta el 2050, y considera un error que España se ponga al frente de ese objetivo ignorando las necesidades de la industria y el empleo. Economía pone el ejemplo de Alemania, donde el 37 % de la energía sigue dependiendo de las centrales de carbón, y pide sensibilidad porque la otra opción es el «peche de plantas». Esta solución, dijo Conde, significa renunciar a industrias eficientes que será determinantes para que el coste energético en España sea competitivo respecto a otros países de Europa.