Plantea un reparo suspensivo que el pleno tendrá que levantar para municipalizarlos
13 mar 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Compostela Aberta parecía tenerlo todo dispuesto este fin de semana para defender la municipalización de la grúa y la ORA en el pleno del próximo jueves. Armado con el último informe jurídico, pese al reparo que mantenía Intervención por la subrogación del personal sin que medie sentencia firme ante las limitaciones legales para la modificación de plantilla, el gobierno de Martiño Noriega veía el camino expedito para formular al menos la aprobación definitiva sin sobresaltos. Eso sí, pendiente del sentido del voto de socialistas y nacionalistas, a los que el viernes pedía que se sumasen a la propuesta del gobierno.
Pero la semana empezó complicándosele. Hasta el punto de requerir ayer mismo un nuevo informe a la asesoría jurídica municipal después de que Intervención emitiese otro el viernes, pero que el ejecutivo no conoció hasta ayer, que declaraba que su reparo era suspensivo. Y eso cambia el escenario. Porque si antes el tema se sometería a deliberación directamente, sin más preocupación para Compostela Aberta que el signo de la votación de cada grupo -con que se repitiera el de la aprobación definitiva, como esperaba, le era suficiente para asegurar la municipalización del servicio-, ahora se impone una votación previa.
Y esa introduce nuevas incertidumbres. Porque se trata de levantar la suspensión del reparo introducido por Intervención. Le corresponde al pleno hacerlo y aunque a Compostela Aberta le llega con mayoría simple, por sí misma no la tiene, con lo que depende de lo que hagan los demás grupos, sobre todo socialistas y nacionalistas, cuya abstención les valdría, aunque todo apunta a que difícilmente conocerán su posicionamiento hasta el mismo pleno.
Sorpresa en el gobierno
La sorpresa en el gobierno saltaba en la mañana de ayer. «Quince minutos antes», dicen fuentes del ejecutivo, de que arrancase la comisión que habría de informar el asunto para su remisión al pleno les llegaba el informe de Intervención, una ampliación del del día 5 y que introducía un reparo suspensivo que no constaba entonces, según Martiño Noriega, cuya reacción no se hizo esperar. El reparo suspensivo se vincula al caso de que el visto bueno a la municipalización de ambos servicios implique la aprobación del expediente del encargo de su gestión a Tussa, lo que la interventora pide que se aclare, según expone después de aclarar que todos los reparos que pueda poner este servicio dentro de sus competencias son, por imperativo legal, de efectos suspensivos cuando afecten a disposición de gastos, reconocimiento de obligaciones u ordenación de pagos.
Martiño Noriega dio orden entonces de que los servicios jurídicos estudiasen la situación, con la intención de mantener la propuesta para el pleno del jueves. «Dende o respecto máximo», dijo sobre la advertencia de Intervención, «traballarémolo co departamento xurídico de cara a poder contraargumentar». Ese informe le llegó ayer mismo.
Y en base a él, el gobierno municipal ha decidido que el pleno dirima la discrepancia entre ambos informes este mismo jueves. Porque el jurídico emitido ayer mismo defiende no solo que no procede la clarificación solicitada por la interventora -porque el procedimiento ya exige especificar la modalidad de gestión- sino que reitera, en cuanto al reparo a la subrogación del personal por Tussa, que, por su complejidad, es susceptible de diversas interpretaciones jurídicas. Y defiende esa subrogación.
Martiño Noriega: «O marco legal non quere que se presten servizos de xestión directa»
Noriega respondía ayer al nuevo escenario indicando que «toca respectar» la decisión de Intervención, pero también «traballar para dar razóns dentro do marco legal de que se pode recuperar o servizo, porque se asumimos que non se pode recuperar ese servizo asumimos que non se pode recuperar ningún». Un marco legal, añadía, «que non quere que se preste ningún servizo de xestión directa», pero «hai concellos que teñen demostrado que se poden recuperar e nós temos informes que argumentan iso».
El alcalde defiende que recuperar la ORA y la grúa podría ser «un primeiro paso para outros servizos». Y posiblemente ese sea el problema, aduce, ante las «resistencias ideolóxicas» que dicen encontrarse en este proceso. Porque el alcalde no tiene duda, apunta, de que «detrás da cuestión da ORA o que hai é medo que tentemos recuperar outros servizos de maior entidade, como o da auga». «Ao mellor o problema está en abrir a espita», proclamaba ayer Noriega.