Delitos sexuales y asaltos a casas subieron más del 20 % en el 2017

Xurxo Melchor
xurxo melchor SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

SANDRA ALONSO

El informe anual de seguridad solo refleja caídas en robos con violencia y de coches

02 mar 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

El 2017 no fue un buen año para Santiago en lo que a la evolución de la criminalidad se refiere. La capital gallega sigue teniendo índices muy altos de seguridad, es cierto, pero también lo es que el año pasado se experimentaron fuertes subidas en los delitos que preocupan especialmente al ciudadano, como son los de tipología sexual o los robos con fuerza en domicilios y establecimientos comerciales. En ambos los incrementos superaron el 20 %, mientras que en el apartado positivo tan solo se situaron los robos a personas con violencia e intimidación y las sustracciones de vehículos. En total, en el ejercicio pasado se contabilizaron 3.823 infracciones penales en la capital gallega, por las 3.523 del 2016, lo que supone 300 más y una subida del 8,5 %.

El informe de criminalidad que hizo público ayer el Ministerio del Interior refleja que el año pasado se produjeron en Santiago 24 delitos contra la libertad e indemnidad sexual, cuatro más que en el 2016, lo que supone un incremento del 20 %. Además, las agresiones sexuales con penetración, las más graves para la víctima, se duplicaron al pasar de dos a cuatro.

Tampoco son buenos los datos de criminalidad del 2017 en lo que se refiere a robos con fuerza en domicilios, establecimientos comerciales y otro tipo de instalaciones. El año pasado se contabilizaron un total de 165 delitos de este tipo, lo que supone un 21,3 % más que en el 2016, cuando el balance anual se cerró con 136 casos.

El dato es más preocupante al desglosar los asaltos a viviendas, que son los que más alarma social suscitan. De los 165 robos registrados en la ciudad, 119 fueron en viviendas, lo que supone una subida del 33,7 % con respecto al año anterior, en el que tan solo se registraron 89.

Otro de los apartados del informe anual de criminalidad de Santiago en los que se evidencia un significativo incremento de los delitos es el reservado para las lesiones -tanto graves como menos graves- y las riñas tumultuarias. En el 2016 hubo 31, mientras que el pasado año se cerró con 37, un 19,4 % más.

La mayor caída, con un descenso del 23,9 %, se ha registrado en los robos con violencia e intimidación a personas. El año pasado se cerró con 51, dieciséis menos que en el 2016. También ha mejorado el dato en lo que respecta a las sustracciones de vehículos, con una caída del 14,3 % al bajar de 49 a 42.

Tráfico de drogas y hurtos tampoco tuvieron un buen comportamiento durante el año pasado, aunque los incrementos experimentados fueron más moderados. En el caso de la venta ilegal de estupefacientes, se registraron quince denuncias, por las catorce del 2016, lo que supone un 7,1 % más. En el de los hurtos, se pasó de 1.521 a 1.595, un aumento del 4,9 %. En el 2017 no hubo ni un solo caso de secuestro ni de homicidio doloso o asesinato consumado, en esta tipología delictiva solo se registró uno en grado de tentativa.

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La criminalidad baja en 4 de las 7 ciudades gallegas y Santiago es en la que más sube

La evolución de la criminalidad en Santiago es aún más negativa si se la compara con la del resto de las ciudades gallegas. Los delitos penales solo suben, además de en Compostela, en otras dos urbes, A Coruña y Lugo, mientras que bajan en las otras cuatro.

La mayor caída, un 6,4 %, la ha cosechado Ourense, que ha pasado de los 3.639 delitos penales registrados en el 2016 a los 3.406 del año pasado. Más discretos son los otros datos. Vigo cayó un 1,9 % al contabilizar 9.064 casos que habían sido 9.236 en el ejercicio anterior. Ferrol (-1,1 %) y Pontevedra (-0,8 %) también muestran una tendencia positiva. La ciudad departamental pasó de 2.126 a 2.103 delitos penales y la capital del Lérez de 3.019 a 2.995.

Lejos del 8,5 % de incremento de la criminalidad de Santiago se sitúan A Coruña (2,7 %) y Lugo (1,3 %). La primera pasó de los 9.415 delitos penales denunciados en el 2016 a los 9.671 del año pasado, mientras que la segunda registró 38 casos más, al pasar de 2.858 a 2.896.