Cándido Díaz: «Estudiamos un posible trasplante de riñón de donante vivo en 8 pacientes»

JOEL GÓMEZ SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

Sandra Alonso

El jefe de nefrología del CHUS cree que la mejor opción es el injerto anticipado, antes de diálisis, y se hicieron dos en el 2017

03 feb 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Nefrología del CHUS trabaja para potenciar las técnicas domiciliarias de tratamiento renal sustitutivo, además del trasplante anticipado como la mejor terapia, explica el jefe del servicio, Cándido Díaz. Es además vicepresidente del comité organizador de la décima reunión de diálisis peritoneal de la Sociedad Española de Nefrología, que se clausura esta tarde en el Palacio de Congresos de la ciudad.

-¿Cómo es la situación de la enfermedad renal crónica en el área de Santiago?

-Está en aumento, como ocurre en Galicia y en España. Desde un estudio epidemiológico realizado en el 2010 se nota un incremento muy importante.

-¿Y cómo se responde a esa realidad?

-La enfermedad renal crónica, desde los estadios iniciales, se asocia a la enfermedad cardiovascular, hipertensión, diabetes, obesidad y envejecimiento, que afectan a gran parte de la población. El gran reto es prevenirla, para que no aumente más, controlando esos factores de riesgo. Y si aparece, evitar que progrese hasta los estadios finales, que van a precisar terapia renal sustitutiva.

-¿Cómo es esa terapia sustitutiva en Santiago?

-El 56 % de nuestra población prevalente en terapia renal sustitutiva es trasplantada, a diferencia de lo que ocurre en Galicia, donde lo son el 48 %, o en España el 52 %. Eso es muy positivo. Otros datos de interés son el aumento, en el último año, de pacientes que inician terapia sustitutiva con una técnica domiciliaria.

-¿Qué técnicas domiciliarias?

-En el área sanitaria tenemos un programa domiciliario de diálisis peritoneal con 42 pacientes, y 2 más en hemodiálisis domiciliaria.

-¿Y en los hospitales?

-En el Clínico hay 20 puestos de diálisis, en cuatro turnos, de tres días a la semana cada uno, y se dializan 80 pacientes; y 32 más en Ribeira, donde hay 12 puestos y tres turnos. Además, decidimos qué pacientes acuden a centros concertados, dentro de la disponibilidad de plazas.

-¿Hay lista de espera?

-No puede haberla. Desde el momento que el paciente precisa sustituir la función renal, o se sustituye o fallece. Sí hay lista de espera para trasplante renal, que depende de las donaciones.

-¿Y cómo es la situación del trasplante?

-Existen dos posibilidades: trasplantar un órgano procedente de cadáver, o de donante vivo.

-¿Cuál es la mejor, o son iguales?

-Ofrecemos todas las posibilidades y, si el paciente es candidato a recibir un trasplante, la mejor opción es que sea procedente de donante vivo; y mejor aún, hacerlo antes de que empiece la diálisis, lo que denominamos trasplante anticipado. El año pasado se hicieron dos anticipados, de los cinco de donante vivo efectuados en Santiago. En estos momentos estudiamos un posible trasplante de riñón de donante vivo en 8 pacientes, en diferentes fases; uno de ellos está en hemodiálisis y los otros 7 podrían ser anticipados.

-¿Hay buena experiencia de trasplante renal de donante vivo en Santiago?

-Las intervenciones comenzaron en el 2001, después en el 2006 y en el 2008; y desde el 2013 el programa se ha reactivado de manera ininterrumpida, y a entre un 40 y un 50 % de los pacientes se les ha ofrecido esa posibilidad de ser anticipado, antes de la diálisis.

-¿Cómo es la dinámica de la consulta de nefrología del CHUS?

-Les proponemos a los pacientes y a sus familias las diferentes posibilidades, con un programa en el que participan especialistas médicos, de enfermería y una consulta de intervención social. El año pasado en el servicio se superaron las 7.000 consultas.

Cándido Díaz. Es el jefe del servicio de nefrología del CHUS y vicepresidente del comité organizador de la reunión de diálisis peritoneal que se celebra en Santiago.

Reunión de diálisis. Asisten más de trescientos especialistas de España, Estados Unidos, Francia, Suecia, Bélgica y Portugal.