Los ingresos municipales por IBI crecerán más del 22 % este año

rosa martínez SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

XOÁN A. SOLER

El tipo no sube, pero sí las expectativas por la revisión del 2009 y la inspección del 2017

24 ene 2018 . Actualizado a las 23:31 h.

Los ingresos municipales por el impuesto de bienes inmuebles (IBI) crecerán un 22,8 % este año, exactamente 6,77 millones de euros, hasta superar los 36,3, lo que supone más de la mitad (52 %)de los ingresos impositivos y el 33 % del presupuesto, que se eleva por encima de los 110,2 millones de euros. La mejora de esas expectativas recaudatorias tiene varios factores, al margen de la aplicación del tipo de gravamen municipal, porque este no varía. De hecho, se ha congelado, como el resto de las ordenanzas fiscales, al igual que el pasado año.

Lo que sí varía es la base de cotización, porque continúa vigente la revisión catastral realizada en el 2009 y que comenzó a aplicarse en el 2010 con un período de vigencia de diez años, período que concluirá en el 2019. Esa revisión supone una subida media anual próxima al 6 %, lo que se traduce en torno a 1,2 millones a mayores sobre el censo anterior. A esa programación hay que sumarle las nuevas altas y las revalorizaciones de numerosos inmuebles tras la regularización que realizó la Dirección General del Catastro el pasado año y que alcanzó a unas 11.000 propiedades.

Reclamación de atrasos

De ellas, unas 1.500 suponen nuevas altas. Y el resto verán incrementar su base imponible tras la actualización de valores que conllevaron las reformas, ampliaciones, dotación de nuevos equipamientos (como piscinas) y los cambios de uso detectados en esa inspección. En conjunto sumarán unos dos millones de euros.

La notable mejora en los ingresos impositivos por IBI se alimentará también con los más de tres millones de euros que el Ayuntamieto reclamará en los próximos meses, por atrasos de los años no prescritos, a los titulaes de las propiedades afectadas por esa regularización. Pero en este caso se trata de un cobro puntual, con lo que Raxoi no consolidará derechos para ejercicios posteriores, como sí será con las nuevas altas y las ampliaciones de los inmuebles.

Las previsiones de ingresos por el IBI urbano crecerán hasta los 34,3 millones, un 23,6 %. Los inmuebles con esta clasificación no solo son la gran mayoría del censo inmobiliario de la ciudad, y con valores más altos, sino que aportan además el 84 % de las altas o ampliaciones detectadas en la inspección del pasado año. Y la aportación impositiva de las propiedades rústicas pasará por primera vez del millón de euros. La previsión que hace la Administración municipal alcanza hasta 1.190.000 euros, un 22,7 % más.

Los bienes con características especiales (aeropuertos, autopistas,...) dejarán en Raxoi otros 900.000 euros, al igual que el pasado año, puesto estos no están afectados por la ponencia de revisión catastral del 2009.

El impuesto de vehículos consolida el ligero incremento del 2016

A falta de conocer qué deparó el cobro del impuesto de circulación en el 2017, el Concello aspira no solo a consolidar la discreta subida del 2016 después de varios años de bajadas, sino a mantenerla también en el 2018. Aunque de apenas un 1 % (1,02 %), Raxoi hace previsión de mejorar esos ingresos este año. Son únicamente 50.000 euros más sobre la formulación presupuestaria inicial del 2017, pero acerca las expectativas de ingresos por esta vía a los cinco millones (4.925.000 euros).

Aunque el 2016 concluyó con 5.053.000 euros en derechos reconocidos (por encima de los 4.975.000 proyectados), el gobierno ha echado mano de la prudencia y ha dejado sus expectativas para el 2018 hasta 2.000 euros por debajo de los resultados del 2015. El incremento de la compra de vehículos menos contaminantes y la introducción de beneficios fiscales para esos modelos podría estar detrás de esa proyección, que se queda por debajo de los cinco millones que se superaron en el 2016.