La policía envía a Fiscalía un informe del menor que tiene en vilo a O Castiñeiriño

Xurxo Melchor
xurxo melchor SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

CEDIDA

El conflictivo joven ha sido sorprendido in fraganti en varias ocasiones, pero por el momento se mueve con impunidad

16 ene 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

El conflictivo menor de edad que lleva meses causando problemas en O Castiñeiriño porque rompe lunas de coches a pedradas para robar en el interior de los vehículos ha sido sorprendido in fraganti en varias ocasiones tanto por agentes de la Policía Nacional como de la Local. Ambos cuerpos han realizado constantes operativos conjuntos de vigilancia y control para intentar frenar al joven, que está perfectamente identificado e incluso se ha hablado en varias ocasiones con sus padres. Toda esta labor de investigación se ha plasmado en un detallado informe que ya está en poder de la Fiscalía de Menores, de la que depende ahora tomar cartas en un asunto que tiene hartos y muy preocupados a los vecinos de este barrio compostelano.

Por el momento, sin embargo, el menor, que tiene 14 años de edad, actúa con total impunidad para disgusto de los vecinos y hartazgo de los policías, que esperan que no se tarde más en tomar medidas judiciales para poner fin a una situación que ha ido demasiado lejos. Mientras, el operativo especial de vigilancia se mantiene y al chico se le practican frecuentes cacheos cuando le ven en la calle. Un esfuerzo que no ha podido evitar razias como la última conocida, cuando en la madrugada del 27 al 28 de diciembre el joven rompió los cristales de nada menos que quince vehículos. En algunos robó objetos del interior, pero en otros no, lo que hace pensar que no sea solo el robo el móvil de los delitos, sino también el mero vandalismo.

Casa okupa

El otro asunto que preocupa a los vecinos de O Castiñeiriño, aunque no tanto como el del conflictivo menor que les tiene en vilo, es el de la casa abandonada en la que se ha instalado un nutrido grupo de okupas. Está situada en el vial que desde el barrio da acceso al colegio Manuel Peleteiro. Se trata de una gran vivienda de piedra que fue embargada por un banco. Correspondería por tanto a la entidad financiera iniciar las acciones judiciales necesarias para que se pueda desalojar a las personas que se han instalado en ella.

Mientras tanto, la policía sí que está llevando controles periódicos en los exteriores de la casa, pero no pueden entrar ni desalojarles hasta que el banco, como propietario, cuente con una orden judicial. Fruto de esa vigilancia, recientemente se inmovilizó uno de los vehículos que utilizan los okupas, que no tenía ni seguro ni ninguna otra documentación en regla.

Su madre le quita las zapatillas para que no pueda salir de casa y él se jacta ante los agentes

El del menor que destroza coches y roba en su interior no va a ser, ni mucho menos, un problema sencillo de solventar. Los agentes que conocen el caso advierten que el joven es consciente de que, al tener solo 14 años, no tiene responsabilidad penal. «Él sabe que no podemos hacer mucho más contra él y siente que se mueve con total impunidad, aunque tampoco es así ya que la Fiscalía de Menores puede tomar cartas en el asunto», explica un policía, que relata también como el chico se jactó ante el compañero que le había sorprendido robando de que lo volvería hacer en cuanto que se le volviese a presentar la oportunidad.

La policía también ha hablado con los padres del menor, que residen en Lamas de Abade, para intentar que sean ellos los que pongan los medios para controlarle. La madre explicó a los agentes que había hablado con él y que había llegado incluso a quitarle las zapatillas -su calzado habitual- para que no pudiera salir de casa por las noches, que es cuando acostumbra a llevar a cabo sus fechorías. De nada ha servido y todo hace pensar que el chico está fuera de control. La de los servicios sociales podría ser otra vía de actuación, ya que entre los agentes que conocen el caso también se sospecha que ya ni tan siquiera está asistiendo a clases.