Alén Tarrío reabre el Pampín de la rúa de San Pedro con un menú tradicional

M. M. SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

PACO RODRÍGUEZ

«La idea es que el sabor y el lugar recuerde al ambiente familiar», afirma el chef

16 dic 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El Pampín de la rúa de San Pedro fue un clásico de las tascas de Santiago, y su cierre hace unos años dejó huérfanos a sus habituales. Este hueco acaba de ser cubierto por Alén Tarrío, cocinero compostelano formado en los fogones de Marcelo y que logró su mayoría de edad al frente de las cocinas del Altamira y Curro da Parra.

Alén reabrió el jueves el Pampín, y lo hizo con una carta «en la que hago lo que siempre quise hacer. Es una cocina tradicional y que rompe con los clichés de lo que parece que es obligatorio para los cocineros jóvenes». En el Pampín «habrá guisos de choquitos, jabalí y cordero; por la inauguración nos regalaron cinco capones, que preparo con arroz; y perdiz escabechada. Se ofrecen platos completos, lo contrario a lo que se viene haciendo ahora. Hay escabeches, que no es fácil encontrar, pero son sabores de siempre». Se trata de ofrecer una cocina «de calidad, que recuerde los sabores de las abuelas, y a precios moderados para que sea accesible a todos», explica Alén. La carta se completa con tablas de quesos y embutidos, verduras y «guisos, mucha cuchara». El ambiente tradicional se respira también en la decoración y en la vajilla, los platos son como los que cualquiera recuerda en las mesas de las abuelas, y al sentarse a comer se percibe la sensación de estar en el comedor de casa: «La idea es que el sabor y el lugar recuerde al ambiente familiar».