Es el segundo centro de España que lo aplicó y hasta ahora hay cuatro autorizados
06 dic 2017 . Actualizado a las 05:00 h.La Unidade da Dor del CHUS ofrece a los pacientes diversos tratamientos para disminuir en lo posible el dolor crónico: fármacos, ejercicios específicos, intervenciones quirúrgicas y, cuando fallan estas opciones, les implanta un modulador, que es un dispositivo que regula el tratamiento. Desde la semana pasada esta última alternativa mejoró, con la implantación de neuroestimuladores de última generación a dos pacientes con dolor crónico intratable, destaca el Sergas.
«Se trata de un modelo de neuromodulador más, pero que incorpora varias novedades y cambios. Los neuroestimuladores se pueden colocar en diversas partes del cuerpo, pero en este caso se han situado unos electrodos detrás de la médula que producen un estímulo eléctrico y así se consigue modular el dolor para disminuirlo y controlarlo», explica Pablo López Pais. Este especialista de la Unidade da Dor, junto con su colega Javier Carceller, son pioneros de este tratamiento en Santiago.
El CHUS ha sido el segundo hospital de España que ha utilizado esta técnica, aunque hay cuatro autorizados. Es un procedimiento quirúrgico que realizan los anestesistas de forma ambulatoria. Es decir, el paciente regresa a casa al finalizar la intervención, no duerme en el hospital. «El acto quirúrgico en este caso lo hacemos los anestesistas. No es demasiado complejo. Consiste en una pequeña incisión por la que pasa el electrodo y se implanta un generador que funciona con energía eléctrica mediante una batería recargable», agrega López Pais.
Los dos primeros casos en Santiago se realizaron el miércoles de la semana pasada. El viernes y anteayer volvieron al hospital para efectuar su seguimiento. «Evolucionan muy bien los dos, estamos muy satisfechos», sostiene este anestesista. Sufrían dolor de espalda y de las piernas y habían sido operados antes.
Estos novedosos moduladores del dolor están garantizados por 9 años. El CHUS prevé implantar dos más este año, y unos 20 cada 12 meses. «Es muy importante seleccionar bien los pacientes, que respondan bien al tratamiento y que les dure tiempo», afirma.
A la mayoría les duele la espalda, las articulaciones o la cabeza
Un 18,8 % de la población se estima que sufre dolor crónico: el 60,5 % de espalda, el 40.2 % articular y el 34,7 % de cabeza. El 42,2 % dicen que ese dolor les impide descansar bien por la noche, al 40,6 % les produce ansiedad, y a un 24,4 %, depresión. Además, la lumbalgia es la causa más frecuente de baja médica y casi duplica a la gripe, que le sigue en incidencia, subraya el Sergas.
La gerencia del área sanitaria resalta que desde que se reestructuró la Unidade da Dor, en el 2014, se ha pasado de atender menos de 3.000 consultas a alcanzar las 5.200 el año pasado, a las que se deben sumar unas 2.000 más de enfermería. Durante ese período, agrega, se ha pasado además de casi 300 procedimientos a superar los mil en el 2016, y la tendencia es aumentar cada año.
El anestesista del CHUS Pablo López es de los pocos del sistema sanitario español que ha obtenido el diploma que otorga la Federación Europea de Medicina del Dolor. Explica que «estos nuevos dispositivos suponen un coste importante al principio, pero reducen otros tratamientos y mejoran la calidad de vida del paciente, y eso compensa claramente su coste».