«La jubilación fue mi salvación»

Elisa Álvarez González
elisa Álvarez SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

PACO RODRÍGUEZ

El espacio de arte Os catro gatos acoge el sábado una charla con el pediatra Iglesias Diz, que cuenta que el arte le permitió una mejor relación con sus jóvenes pacientes

17 nov 2017 . Actualizado a las 01:11 h.

De Pollock ao escaravello (máis ou menos). El espacio de arte Os catro gatos acoge estos días una muestra de pintura del artista y pediatra jubilado José Luis Iglesias Diz (Forcarei, 1947), cuyo sugerente título incluye un pequeño homenaje a su abuela. El sábado dará una charla en la que hablará de su faceta como pintor, una faceta que comenzó de joven y a la que ahora se dedica «todo el tiempo que quiero».

-De Pollock ao escaravello...

-Sí (se ríe), porque hay dos series de cuadros, una hecha con la técnica del goteo sobre superficie de cartón y otra que realicé más adelante y a la que llamé escaravello. La denominé así porque cuando el cartón está roto da la impresión de que hubiese pasado un coleóptero, un escarabajo. Se me ocurrió el nombre porque me recordaba a una frase de mi abuela cuando el escarabajo se comía las patatas, y me viene a la cabeza su expresión: ¡Mata ao escaravello! Apliqué ese detalle de humor y por ese se llama De Pollock, por una serie de cuadros, ao escaravello, que son la otra serie.

-¿Siempre ha pintado o fue una afición que surgió tras la jubilación?

-Ahora pinto como pintor y antes como aficionado pero siempre me gustó. La primera exposición que hice fue en el año 80 en el Modus Vivendi, un pub que en mi época era muy famoso. A partir de ahí seguí con cierta discontinuidad porque soy médico y la medicina es una carrera absorbente, dura, y en la que hay que estar preparándose siempre, por lo que no podía pintar todo lo que quería.

-O sea que su jubilación no ha sido para dar paseos.

-Creo que la jubilación fue mi salvación, fue tan importante como cuando dejé de fumar hace cuarenta años.

-¿Su salvación?

-Sí, porque soy feliz, hago un montón de cosas que siempre quise hacer y antes no podía, como pintar el tiempo que me da la gana, hacer escultura, reunirme con la gente del mundo del arte, ir a exposiciones, escribir, en unas semanas voy a editar un libro de cuentos...

-Es un pensionista activo.

-Y eso que no quería jubilarme. De repente a los 65 me dijeron: se acabó. Porque antes podíamos quedarnos hasta los 70 años.

-Y al final le hicieron un favor.

-Pues claro. Al principio te quedas contrariado porque tenía proyectos de trabajo, en concreto de salud mental infanto-juvenil ya que en los últimos veinte años me dediqué a la adolescencia. Sigo trabajando en estos aspectos, pero ya no de una manera sistemática. Al principio fue una contrariedad pero me duró tres meses, después me empecé a dar cuenta de que se puede vivir con menos dinero y aprovechar para hacer con más intensidad todas aquellas cosas que quería hacer.

-¿Encontró alguna relación entre arte y pediatría? ¿Le ha valido la pintura para su desarrollo profesional?

-Sí, siempre se ha dicho que la buena medicina es humanista, y es importante que haya una buena relación médico enfermo. Yo siempre he compaginado el estudio de la medicina con el estudio del arte, y el hecho de hacer las dos cosas me ayudó muchísimo con los niños y con los padres, y a ser capaz de tener otros sentimientos. Lo mismo me ocurre con la música, que también me gusta muchísimo y eso influyó en la medicina. Fue un mecanismo de relajación que utilizaba y también me daba mayor riqueza de comunicación con los padres y con los enfermos.

-¿Cómo es la muestra?

-Hay doce obras, cuatro de ellas son en formato en madera, y el resto están sobre cartón de embalaje preparado.

El protagonista. José Luis Iglesias Diz fue pediatra en el Complejo Hospitalario de Santiago. Expone en el espacio Os catro gatos.

Una exposición con charla. Pinta desde siempre, pero se dedica con más intensidad desde que se jubiló, hace cinco años. El sábado a las 18 horas, en la propia galería, dará una charla en la que explicará su obra.