Cela justificó su apoyo en que era «o menos malo» y Reyes reconoció que la negociación fue «correcta»

La Voz

SANTIAGO

19 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Rubén Cela invirtió la mayor parte de su tiempo en justificar su apoyo a las cuentas de Compostela Aberta, un excusatio non petita que el portavoz nacionalista argumentó sobre tres escenarios posibles: prorrogar los presupuestos del 2016, echar mano de una cuestión de confianza o alcanzar un acuerdo. A su entender, la última de las opciones era «a menos mala para Santiago», de ahí que los nacionalistas decidieran negociar y hacerlo desde el primer día siendo «claros e transparentes». Eso sí, aunque reconoció que la mayor parte de sus propuestas habían sido recogidas, también puntualizó que otras habían quedado en el tintero. Con todo, el BNG había hecho lo posible por «mellorar» un proyecto que no era el suyo.

Francisco Reyes comenzó reconociendo, como hizo en muchas otras ocasiones, que los vecinos habían colocado al PSOE en la oposición y que su obligación era ejercerla con responsabilidad. Con esa intención había hecho una serie de propuestas que a entender de Reyes mejoraban las cuentas y recogían las demandas vecinales; algunas de ellas ya las compartían con Compostela Aberta y otras fueron añadidas. Con todo, «botamos en falla» un plan plurianual para los proyectos de largo recorrido, así como la continuidad -aunque en un porcentaje menor- de las subvenciones nominativas.

La sombra de Barba

La única crítica, por lo tanto, llegó de la bancada popular. Pero ni siquiera a su ideología; Hernández llegó a decir que «se por ideoloxía fose, aínda poderiamos compartir cousas»; pero no, lo que el portavoz del PP cree que reflejan los presupuestos es «unha grande incapacidade para atopar apoios e axustar as prioridades da cidade».

El PP advirtió sobre el endeudamiento de la ciudad, la escasa inversión en el tejido productivo y el incremento de los gastos, además de criticar el descenso de partidas para tráfico, servicios, limpieza, seguridad o atención al ciudadano, «un servizo fundamental» para Compostela Aberta. Y lo mismo con el departamento de atención al consumidor «que dirixe o señor Barba, o aínda futuro concelleiro socialista. Resulta sorprendente que tivera mellor trato cun goberno do PP que o recibido por este goberno que di considerar ao seu partido un socio preferente».