Las viviendas alquiladas a estudiantes podrán tener además uso turístico

j. gómez SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

Álvaro Ballesteros

Nava Castro y José Luis Maestro, de Turismo de Galicia, explicaron la norma en una concurrida Cámara de Comercio

17 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Los pisos que se alquilen a estudiantes durante el curso, el resto del año podrán destinarse a viviendas de uso turístico. Para adaptarse al decreto que regula esta actividad, publicado en el Diario Oficial de Galicia el viernes, y en vigor desde el 10 de mayo, deberán tener uso turístico por un período inferior a 30 días más de una vez al año. Así lo explicaron Nava Castro, directora de Turismo de Galicia, y José Luis Maestro, director de Competitividade de la institución, en una concurrida sesión, anoche en la Cámara de Comercio.

Abogados, arquitectos y otros profesionales, además de empresarios, representantes de inmobiliarias, y propietarios, asistieron a una charla, que finalizó con casi una hora de preguntas. Santiago es uno de los municipios donde se estima que puede tener mayor incidencia dicha norma, y por eso se acudió para resolver dudas, indicó Castro. «O obxectivo é evitar problemas como os que se deron en Barcelona», dijo.

Si la vivienda se alquila por más de 30 días, entonces la regulación entra dentro de la casuística de la Ley de arrendamientos urbanos, precisó.

En todo caso, para destinarse a uso turístico deberán inscribirse en un registro autonómico; tener unos servicios mínimos, como mobiliario básico, o calefacción si se pretende aprovechar ese uso entre octubre y mayo; ofrecer hojas de reclamación; que el arrendador esté localizable por teléfono las 24 horas, para resolver posibles incidencias; o comunicar telemáticamente a la Policía o la Guardia Civil los datos de las personas usuarias. Además, para darla de alta deberán abonar 56,82 euros de tasas a Turismo, y disponer de un seguro de responsabilidad civil apropiado.

En todas estas cuestiones se insistió durante las intervenciones. Los asistentes mostraron inquietud ante la posible reacción de las administraciones municipales, cuando se les pida documentación para acreditar la situación legal de la vivienda; además de por asuntos de fiscalidad (hay que declarar a Hacienda); o por posibles discrepancias entre el vecindario en caso de que la vivienda esté en un edificio con varios propietarios.

Nava Castro confirmó que deberá darse un recibo al turista en caso de que lo pida; o una factura si quien alquila es una plataforma de Internet, una inmobiliaria o cualquier otra empresa.

También se plantearon cuestiones de herencia: si un hijo puede destinar a ese uso la vivienda de sus padres aunque no esté a su nombre todavía, y se explicó cómo hacerlo. Y situaciones particulares, como el uso de una vivienda dividida, pero que no esté reconocida como tal. José Luis Maestro precisó asimismo que la Inspección de Turismo podrá acudir a esas viviendas en caso de estimarlo oportuno.

Nava Castro y Maestro indicaron que en el teléfono 012, o en las dependencias de Turismo de A Barcia, resolverán dudas a sobre todas esas y otras cuestiones.