Una sentencia que anula el concurso de conserjerías del 2013 es la última resolución judicial
SANTIAGO
El continuo goteo de sentencias que llegaron a las instancias del equipo de gobierno por efecto de gestiones anteriores hizo que Compostela Aberta pusiese el grito en el cielo, al representar tres millones de euros los reveses judiciales para el Concello. Los grupos de la oposición consideran que estos casos pueden ocurrir si las interpretaciones judiciales no coinciden con las municipales.
El penúltimo asunto desfavorable a Raxoi, sin embargo, fue consecuencia de un acuerdo de Compostela Aberta, al responsabilizar a los vecinos del cobro de daños en los vados de las aceras. La justicia le dio la razón a los ciudadanos demandantes.
El último caso es, de nuevo, un golpe para el actual gobierno por efecto de un acuerdo adoptado por el grupo popular, que fue anulado por el juzgado Contencioso-Administrativo número 1. La sentencia es consecuencia de la demanda interpuesta por la segunda clasificada en el concurso para la adjudicación de la limpieza y conserjería de los colegios, Sermasa. La concesión se la llevó la UTE Ferrovial-Ferroser, pero fue anulada por dicho juzgado, que consideró que ese acuerdo no era conforme a derecho.
El juez le concedió quince días hábiles al Ayuntamiento para presentar un recurso de apelación. Sin embargo, el gobierno local decidió anular los acuerdos de la Xunta de Goberno del año 2013 que otorgaron y luego confirmaron (al desestimar el recurso de Sermasa) la concesión a Ferrovial-Ferroser.
Tal como requería la sentencia, resolvió retrotraer el procedimiento a la valoración de las ofertas participantes en el concurso, con una justificación de cada uno de los factores valorados como mejora. Mientras tanto, la actual adjudicataria seguirá prestando el servicio.