El Hospital La Rosaleda amplía los tratamientos personalizados de su unidad de estética

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08 dic 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

La unidad de estética del Hospital La Rosaleda amplía su oferta de tratamientos personalizados para ofrecer mejor imagen. En concreto, y con la aplicación de la toxina botulínica, consigue «tratar pequeñas arrugas y líneas de expresión de forma rápida y eficaz, sin complicaciones ni apenas molestias», indica.

Esas líneas o arrugas de expresión son los pliegues y surcos visibles que se originan al contraer los músculos de la cara cuando se gesticula, debido a fijaciones en la piel, señala Dwight Enrique Zambrano, especialista de la unidad de estética. Hay personas en quienes se manifiestan muy pronto y de forma muy visible, dando una apariencia más envejecida o una imagen diferente a la que desean ofrecer.

Tras evaluar sus antecedentes médicos y observar su expresividad, si la persona reúne condiciones idóneas para recibir la toxina botulínica se le aplica el tratamiento. Solo requiere unos minutos y es «poco o nada doloroso, dependiendo de la sensibilidad de cada uno», sostiene Zambrano. Además, en estética no se han registrado complicaciones graves con el bótox, ya que se utilizan dosis muy pequeñas «por lo que es un tratamiento muy seguro», agrega este especialista. La acción de la toxina comienza en la primera semana y es completa en la siguiente.