El Concello asume la obra de Silvouta tras la resolución de las deficiencias

La Voz SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

XOÁN A. SOLER

El gobierno local reclama un mayor compromiso de Madrid con el transporte urbano

16 sep 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

El Ayuntamiento recibirá este semana formalmente las obras de ampliación de la depuradora de Silvouta. Las instalaciones quedaron finalizadas a principios de año y entre febrero y abril fueron sometidas a diversas pruebas en las que se detectaron una serie de deficiencias que Madrid comunicó a la entidad responsable de la actuación, Acuaes. Frente al criterio del PP de que podría asumirse la actuación, Compostela Aberta estimó que con anomalías no podía recibir la obra.

Esta misma semana el Concello recibió los borradores de las actas que permiten rubricar ya la recepción. El problema es que el coste de la instalación representa para Raxoi un 10 % más de lo suscrito en el convenio de las administraciones implicadas, es decir 729.000 euros, según expuso Xan Duro en el pleno de ayer. La popular Teresa Gutiérrez reconoció el incremento, pero defendió la necesidad de la ampliación dado el impacto de los vertidos actuales y el retraso de la planta de O Souto.

Sobre este último proyecto, hubo coincidencia en el desconocimiento del mismo y en la necesidad de desbloquearlo. Gutiérrez reclamó estar encima del Gobierno para reactivar la depuradora. El socialista Paco Reyes expresó su temor a la pérdida de los fondos europeos y el nacionalista Rubén Cela urgió también la ejecución del proyecto.

El mayor rifirrafe en la sesión plenaria se produjo en el debate sobre la solicitud del Concello de una mayor financiación del transporte urbano de viajeros. El grupo de gobierno, uniéndose a la iniciativa de distintos concellos españoles, planteó la aprobación de una ley por parte del Gobierno central sobre la financiación del transporte urbano que permita una mayor financiación del transporte y la eliminación de las diferencias incomprensibles entre ayuntamientos de entidad similar.

Tanto PSOE como BNG apoyaron el alcance de la propuesta, pero el popular Agustín Hernández sostuvo que era una declaración de municipios con gobiernos afines al de Santiago y que el propio Concello tiene que actuar para lograr la mejora del servicio. El PP se abstuvo.

La referencia del portavoz popular al color político de los ayuntamientos suscitó el enfado del alcalde Martiño Noriega, quien en un tono elevado dijo que la propuesta la asumían concellos de otros colores y pidió «respeto» para ellos.