Un año más se reunieron con pulpo y churrasco para recordar aquellos buenos tiempos del fútbol en la capital gallega
29 may 2016 . Actualizado a las 05:00 h.José Manuel Couceiro fue uno de los anfitriones en una «reunión de los de siempre», aquellos jóvenes que en la década de los cuarenta y principios de los cincuenta disfrutaban con el fútbol en la capital de Galicia. Eran juveniles de los equipos modestos de Santiago, unas promesas del deporte rey que ahora andan por los setenta años. En una carpa instalada en el Paz Nogueira del Castiñeiriño, con unos entrantes de jamón y queso, con el típico vermú de antes, más de cincuenta comensales fueron haciendo tiempo para llegar con fuerzas al pulpo y al churrasco. Todos disfrutaron con esta comida anual que organizan, además de Couceiro, Elisardo García y Gelucho Rilo.
Un minuto de silencio
En la edición de este año no faltaron las emotivas palabras de agradecimiento y de «mucho cariño» y los recuerdos de aquellas personas que ya no están en el grupo, como son los casos de Garrincha y Eduardo Muñiz, que fallecieron este año. «Siempre hay un recuerdo especial y unas buenas palabras para los que faltan, porque siempre nos acordamos de ellos con un minuto de silencio y con recuerdos imborrables», subraya Couceiro.
En la larga lista de comensales no fallaron Cobas, Fuentes, Castaño, los dos Ventura, Carlos Chispa, Astray (el que fuera alcalde de Ames), Manolo Vidal, Suso Míguez y Raúl, «el mejor defensa y medio volante que había en La Salle y que viene muy elegante», destaca Couceiro, quien con una rápida mirada al pasado explica que llevan más de veinte años organizando esta cita: «Empezamos en el Franco de broma y solo éramos catorce o quince. Ahora siempre nos juntamos más de cincuenta». La fiesta, como todos los años, duró unas cuatro horas.