Toda la oposición ve «afán recaudatorio» en el cobro de los daños en los vados

Xurxo Melchor
xurxo melchor SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

SANDRA ALONSO

PP, PSOE y BNG coinciden en que la ordenanza no permite obligar a los vecinos a reparar las aceras en los accesos a garajes

12 abr 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Pocas veces la oposición ha estado tan de acuerdo en algo en Santiago como en criticar la nueva política de vados que ha puesto en marcha el alcalde, Martiño Noriega (Compostela Aberta), y que pretende que sean los vecinos los que costeen las reparaciones de las aceras cuando los daños están en el acceso a su garaje. Tanto para el Partido Popular como para el PSdeG-PSOE y el Bloque Nacionalista Galego esta medida, nunca antes llevada a cabo por ningún otro gobierno local, tiene una única explicación: el «afán recaudatorio» del ejecutivo municipal.

El PP recuerda que es falso, como dijo el regidor compostelano para justificar su nueva medida, que la ordenanza de vados obligue a los propietarios de los inmuebles que cuentan con un vado a costear el mantenimiento del trozo de acera por el que entran y salen de su propiedad. En este sentido, el concejal Alejandro Sánchez-Brunete, recuerda que la norma en cuestión «ha estado vigente veinte años» y que nunca «se ha aplicado de esta manera porque se entendía que produciría unos efectos manifiestamente injustos». Para el edil popular «el gobierno local se está desentendiendo de su responsabilidad de mantener en buen estado los pavimentos y se la traslada a las comunidades de vecinos para satisfacer su voracidad recaudatoria con una batida económica contra los vecinos».

La ordenanza actual data del 2012 y dice en su artículo 90 apartado c que los titulares de una licencia de vado deberán «manter o bo estado de conservación dos pavimentos e a limpeza dos accesos ao inmoble de graxa, aceites ou outros elementos que puideran depositarse como consecuencia da entrada e saída de vehículos». Tanto el PP, como socialistas y nacionalistas consideran que la norma no recoge explícitamente esa obligatoriedad de los vecinos de arreglar ellos las aceras de sus vados y que por eso el Concello no había requerido antes a las comunidades de propietarios a ejecutar y pagar tales obras.

La ordenanza anterior, que estuvo en vigor desde 1998, era mucho más clara a la hora de recoger esa supuesta responsabilidad de los vecinos en el mantenimiento de las aceras en las que hay vados porque decía que «os desperfectos ocasionados nas beirarrúas con motivo do uso especial que comportan a entrada e saída de vehículos serán responsabilidade dos titulares que están obrigados a reparalos por requerimento da autoridades competente». Pese a ello, el Concello, gobernado por PSOE y BNG, no optó por obligar a las comunidades de propietarios a costear estas obras.

El mero desgaste

Para el portavoz socialista, Paco Reyes, el alcalde se está equivocando al aplicar una norma que afecta a los «usos privativos» cuando los vados son tan solo un «uso especial». Considera que dado que es el Ayuntamiento el que decide qué materiales utilizar en las aceras «no tiene sentido que tenga que ser el vecino el que pague el mantenimiento», dado que en ocasiones, como en calles como Alfredo Brañas, se emplean baldosas de pizarra u otros materiales que son poco duraderos.

Reyes distingue entre el uso normal de los vados y el normal desgaste con el uso indebido que pueda llegar a producirse, en cuyo caso sí está a favor de que la obra la paguen aquellos que han provocado el desperfecto. «Pero por qué van a pagar los vecinos cuando en su vado, muy probablemente, todos los días se suben vehículos de reparto, de emergencias o incluso las máquinas del servicio de limpieza, ¿cómo se va a saber qué ha causado el daño en la baldosa?», se pregunta. Para el socialista, la nueva política de vados es, como fue el intento de subida «indiscriminada y generalizada» del IBI o los fotorrojos «una prueba de que Compostela Aberta está demostrando una voracidad recaudatoria».

Rubén Cela, del BNG, es de la misma opinión y cree «esaxerada» y «confiscatoria» para los vecinos la interpretación que Compostela Aberta hace de la ordenanza de vados. Resalta que «hai un estado lamentable de conservación da cidade que non está motivado por un mal uso das rúas e beirarrúas dos veciños senón pola deixadez do Concello, tanto deste goberno -de CA- como do anterior en materia de mantemento» y considera que debe ser el Concello el que haga frente a esas reparaciones de las aceras cuando el desperfecto se ha causado por el uso normal de los vados y no por otros motivos.

«Se sacuden su responsabilidad con esta batida económica contra los vecinos» Alejandro Sánchez-Brunete

«Compostela Aberta está demostrando una gran voracidad recaudatoria» Paco Reyes

«O estado lamentable de conservación da cidade é culpa da deixadez do Concello» Rubén Cela