¿Quo vadis, nave cinco?

SANTIAGO

13 feb 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

La nave 5 cabalga de nuevo sobre las olas de la polémica. Bueno, es una forma de surfear como otra y si esta instalación de la Praza de Abastos cumple esa función, bienvenida sea. Otra función, por ahora, no se le ve aunque sí se le espera. Al menos eso da a entender el pliego de condiciones que está redactando el Concello para darle uso al recinto. Cuidado con lo que refleje ese pliego, porque de él estarán tirando en este momento decenas de soluciones. La incorporación de unas y el descarte de otras será motivo para nuevas andanadas de polémica de esta nave que nació como ángel de la discordia. No sabe Xosé Manuel Iglesias la que armó por no meter, aunque fuese con calzador, el supermercado previsto inicialmente en el recinto. A lo mejor no encajaba, pero ahorraría enojos y hosquedades. Y es que, cada vez que este redactor sacó a colación la nave 5 con algún hostelero o algún placero, su rostro adquiría otros matices. Y terminaban arremetiendo contra algún culpable, según las preferencias de cada uno. Lo malo para Raxoi es que está comenzando a centrar culpabilidades dispersas, y eso es preocupante. Por eso le reiteramos que acierte con los párrafos del pliego de condiciones, a sabiendas de que el concurso seguirá teniendo partidarios y detractores. De momento, la primera en la frente la recibió CA al retirar las tablas de degustación. ¿Promoción de artículos placeros? ¿De artículos placenteros? ¿Ventas de proximidad? ¿Exhibiciones culinarias? ¿Exposiciones? ¿Bares de tapas? ¿Espectáculos taurinos para luego despiezar la carne in situ? Todo cabe a priori, salvo la tauromaquia, creo. Atentos al cañón humeante del pliego.