Las piezas de piedra de los Canteros de Poio no llegaron porque caducó el convenio
20 dic 2015 . Actualizado a las 16:29 h.«Aquí estamos igual que hai trinta anos», dicen los vecinos de Angrois. Las administraciones, tras el grave accidente ferroviario, prometieron a hacer una zona de descanso para peregrinos, un parque público, un campo da festa y el parque infantil. A estas alturas tendría que estar todo hecho, pero aunque algunas de las actuaciones están prácticamente ultimadas, otras aún no han concluido: «Queríamos regalarlles o parque aos rapaces polo Nadal, pero non puido ser», dice el vicepresidente de la asociación de vecinos, Martín Rozas.
La aparición de unos restos arqueológicos, con el consiguiente abandono temporal de los trabajos, tuvieron mucho que ver en ello. El Concello le acaba de ampliar el plazo a la empresa para rematar las actuaciones. Pero incluso en este caso de los proyectos comprometidos tras el accidente la infelicidad vecinal tiene otros aspectos.
Entre las actuaciones que se comprometió a financiar el Ministerio de Fomento está un área de peregrinos, algunos de cuyos elementos serían aportados por la Escola de Canteiros merced a un convenio con la Diputación de Pontevedra. Pero esos elementos pétreos siguen en Poio y no han venido, en medio del enfado vecinal.
Y es que la empresa que construye el área no puede colocarlos porque el convenio ha caducado. Y mientras no se firme otro, no hay piedras. «Estamos moi indignados, porque temos que pelexar por todo. Agora queren outro convenio para as pedras de Poio. Isto non ten xeito», señala Rozas. La asociación vecinal está presionando al Concello para que se solucione el problema de una vez.
Pero al margen de estas actuaciones, alguna regalada y no demandada, las necesidades prioritarias del barrio siguen pendientes. Ahí el nombre de Angrois no cuenta. Igual que hace treinta años, insisten los vecinos. Tuberías viejas que revientan con frecuencia, ausencia de transporte, zonas del barrio a oscuras, carreteras de sin asfaltar, el Camiño de Santiago en mal estado.
Autobús lejano
La lista de demandas que repartieron entre los partidos concurrentes a las elecciones y la remitieron a Raxoi no es corta, aunque ponen de relieve que comparten este abandono de años con otros barrios de Compostela. «Non pode ser que no inverno os maiores teñan que recorrer un kilómetro para coller o autobús», lamenta Rozas. Para mayor inri, las obras que se ejecutan en la autopista les han estropeado los caminos.
Incluso las tareas de desbroce no han sido realizadas, pese a las llamadas del vecindario al Ayuntamiento, «e iso que son terrenos do Concello». Eso sí, hay algo que agradecen los residentes, y es la atención de las policías local y nacional, así como del servicio de emergencias 112 y el Colexio de Psicólogos.
Los vecinos de Angrois, héroes el funesto día del Alvia, han sido objeto de más de cuarenta homenajes y distinciones y siguen siendo llamados a diferentes actos, pero desean ya que eso se vaya olvidando. El olvido que no quieren es el de Raxoi a sus prioridades como barrio.
«O lugar de Angrois está igual que hai treinta anos e moitas necesidades están sin atender»
Martín Rozas