Estas celebraciones se concentran fundamentalmente hoy y el próximo día 18
11 dic 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Las cenas y comidas organizadas por grupos de compañeros de trabajo para despedir el año supondrán un alivio para las economías de los hosteleros de Santiago, que reciben estos festejos como «agua de mayo», en palabras de la presidenta de la Asociación Hostelería Compostela, Sara Santos. Diciembre es tradicionalmente un mes flojo para la restauración, según comentaron varios profesionales compostelanos consultados, porque los clientes prefieren reservar recursos para las comidas y las cenas en familia. De ahí que durante los peores años de la crisis, las celebraciones de empresas sufrieran un retroceso importante que, según los hosteleros, parece empezar a recuperarse.
A la hora de elegir el día para la fiesta, la inmensa mayoría de los compostelanos se inclinaron para salir a cenar con sus compañeros de trabajo el próximo viernes, 18 de diciembre. La concentración de cenas durante esa jornada es tal que en muchos establecimientos ya colgaron el cartel de lleno. La segunda fecha más demandada es hoy y, según diversos representantes del sector, muchos de los que saldrán a cenar esta noche habrían preferido el 18, pero «ya no había sitio». Otras fechas para las fiestas de empresa son los sábados 12 y 19 de diciembre, pero para estos días aún hay plazas libres en todos los restaurantes consultados. En cualquier caso, aunque los fines de semana, por la ventaja de no trabajar al día siguiente, son la primera opción para la mayoría, en algún restaurante tienen reservas para el 26 de diciembre.
Los testimonios de los restauradores apuntan a que este año se recuperará un 10 % de las cenas perdidas en los últimos años, y en algunos establecimientos hasta el 15 %. Además de incrementarse ligeramente el número de las cenas de diciembre, los hosteleros también detectan que se aumenta el número de comensales en cada una y, por otro lado, se reducen las cancelaciones.
Eso sí, mientras en los años anteriores al descalabro económico, las fiestas eran sufragadas muchas veces por los empresarios y comerciantes, en los últimos años «cada uno paga lo suyo».
También se ha producido un cambio en la cuantía económica destinada para estos eventos. En todos los casos se organizan las fiestas con menús cerrados propuestos por los restaurantes y, solo se deja abierta la elección de los segundos platos entre dos opciones. En cuanto al precio, los menús que se servirán en las cenas de empresas oscilan entre los 25 y 50 euros, siendo 30 euros la media más habitual de lo que gastará cada comensal para despedir el año con compañeros de trabajo. Las ofertas disponibles en los restaurantes compostelanos arrancan en los 20 euros, para los menús más sencillos y sin marisco, hasta los 100 o 120 euros, de aquellos en los que se incluyen varios tipos de marisco, carne o pescado y postres variados.
Según restauradores consultados, también se ha transformado el criterio de selección del menú: hace años los clientes consideraban indispensable que hubiera marisco en la cena, mientras que ahora se prefiere una comida más elaborada y variada.
«Diciembre no es bueno para la restauración y las cenas de empresas son como agua de mayo»
Sara Santos