El alcalde ve la situación «anómala» y la oposición urge soluciones
18 nov 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Tras 70 días desde el inicio del curso, el Concello no consigue adjudicar el servicio de comedores escolares a una nueva empresa. De 4 que se presentaron, una no fue seleccionada; y las otras tres renunciaron. La última, Serunión, que atiende ahora los colegios, lo hizo ayer. El alcalde, Martiño Noriega, que ve la situación «anómala», y explica que será la Mesa de Contratación Municipal, integrada por técnicos y representantes de los cuatro grupos de la Corporación, la que determine si se convoca un nuevo concurso, o si existen otras «medidas excepcionais» para adjudicar un «servizo tan sensible».
Los grupos municipales del PP, PSdeG-PSOE y BNG criticaron ayer la actuación de Compostela Aberta en este asunto, y coincidieron en urgir soluciones.
Sánchez Brunete (PP) afirma que la renuncia de las empresas sorprende. La calificó de «extraña», que «non ten lóxica» y que «convén esclarecer». Mostró preocupación, y manifestó que «a situación dos comedores escolares está en precario porque se comezou a tramitar tarde». Los tres grupos políticos coincidían en esto: el nuevo gobierno municipal tomó posesión el 13 de junio, y no convocó el nuevo concurso hasta el 29 de agosto; una demora que Compostela Aberta relacionó con la tardanza, hasta finales de julio, de la Consellería de Educación, en confirmar la subvención para financiar el coste del servicio.
Sánchez Brunete reprueba que responsables del gobierno local se fueron de vacaciones, y que el edil de Educación, Manuel Dios, «está máis preocupado en atopar expedientes de hai 40 anos relativos a distincións á virxe María que en tramitar un procedemento desta natureza, que atinxe a un servizo tan sensible». Indicó que el servicio se «está a manter grazas á responsabilidade e ao sentido da lealdade dos grupos da oposición e aos propios funcionarios do Concello, máis que ao compromiso, intelixencia e firmeza do equipo de goberno»; al que exige «que se aplique».
Para Francisco Reyes (PSdeG-PSOE), «o Concello debe abrir un expediente e informar do acontecido, que non pasou nunca», y que califica de «insólito». Reprueba que el gobierno local no haya sido capaz de solucionar aún ni este tema ni la adjudicación de las escuelas infantiles; y se cuestionó qué servicios va a municipalizar Compostela Aberta de los que había prometido, pues da por hecho que no lo hará con los comedores.
Para Rubén Cela (BNG) lo que ocurre «é un cúmulo de despropósitos do goberno municipal e das empresas que participaron na licitación», y que «evidencia eivas na xestión ordinaria do Concello» por parte de Compostela Aberta, que actuó con «irresponsabilidade». Critica a las empresas por los «graves prexuízos e danos» que la renuncia ocasiona al Concello.
La Federación de asociaciones de padres y madres juzga lo ocurrido como «unha falta de responsabilidade por parte das empresas», y propone que se aproveche para adoptar una buena decisión para el futuro.