Considera clave minimizar las capturas del Unicaja en el aro santiagués y controlar las pérdidas de balón durante los cuarenta minutos
03 ene 2015 . Actualizado a las 16:05 h.El Obradoiro Río Natura Monbus despidió el año con la alegría de una fantástica victoria ante el Barcelona y estrenará el 2015 con otro reto mayúsculo. Mañana, a las 18 horas, visita el Martín Carpena para enfrentarse al líder, el Unicaja de Málaga, el equipo que está realizando la mejor primera vuelta de su historia en la ACB.
Moncho Fernández no duda en calificar al colectivo andaluz como «de primer nivel». Y lo argumenta: «Están defendiendo de una forma excepcional. Ofensivamente son los que más puntos anotan por posesión. Tienen mucho acierto porque hay mucha calidad». Y, además, es un grupo con el sello de Joan Plaza, garantía de orden y método sobre la cancha.
Como sucediese ante el Barcelona, el Obradoiro necesita un partido superlativo para tener opciones de triunfo. Y, como significó entonces el Alquimista de Pontepedriña, «hay que hacer muchas cosas bien». Pero llama especialmente la atención sobre dos aspectos del juego que prevé que serán capitales: controlar las pérdidas de balón y minimizar el rebote del Málaga en ataque.
«Lo que nos interesa es un partido en el que no tengamos pérdidas ni ofensivas ni defensivas, como lo es el rebote de ataque. En porcentaje de posesiones por partido son el equipo que mejor rebotea en ataque. El otro día al CSKA le cogieron veinticinco, que es una barbaridad. Eso merma tu capacidad porque es una opción que le das y una que te quitan. El ritmo del partido lo van a marcar las pérdidas y el rebote, más que la velocidad. Es normal que capturen rebotes, lo que hay es que bajar la media». Ese es el guion que, a priori, más interesa al Obradoiro, en opinión de su entrenador.
Aparte del buen baloncesto que viene practicando el Unicaja, Moncho Fernández subraya el potencial de la plantilla: «La conexión entre Granger y Vázquez está funcionando bien. Además tienen mucha calidad en el perímetro con Toolson, Vasileiadis, Suárez y Kuzminskas, que está demostrando por qué Joan lo trajo del Zalgiris. Y los cuatro interiores tienen un gran nivel».
El técnico santiagués apela al carácter y la convicción: «Tenemos que tener confianza pero no estar confiados. Si vamos confiados, relajados... No vamos a tener el apoyo de nuestro público y va a ser una pista muy compleja. Debemos ir con confianza, sabiendo que podemos competir y también siendo conscientes de que, como nos relajemos un mínimo, pasará lo que a los que han pasado por Málaga».