La Semana Santa va a discurrir incluso mejor de lo que predecían los hosteleros hace casi quince días. Por entonces las reservas de los alojamientos auguraban una ocupación media del 60 %, siendo «muy optimistas», según los responsables de Hospedaxe. Ayer la previsión, sin tener que recurrir al optimismo, avanzó cinco puntos más, de forma que se sitúa en el 65 %.
El dato concierne al tramo del jueves al domingo, es decir, los días turísticos de la semana. El pasado año la cifra no fue nada satisfactoria (53 % de ocupación), por lo que los hoteleros reciben «moi contentos» las predicciones de este año «malia que non son nin moito menos para tirar foguetes, pero hai que ser optimistas na vida», indica el presidente de Hospedaxe, José Manuel Otero.
Un factor que contribuye en buena medida a esa afluencia turística es el hecho de que la Semana Santa se celebra en abril, y eso «da outra alegría». Eso sí, los empresarios aguardan que la climatología no se comporte de forma muy negativa, «que non chova a mares».
La lástima, para ellos, es el transporte aéreo vía Madrid, que encauza mucho turismo internacional y que está flojeando de forma alarmante en Lavacolla, «e iso nos prexudica moito». A juicio de Hospedaxe, «fíxéronse mal os deberes, e dicir que as cousas van ben aí é crer en paxariños preñados».