Una campaña de Cruz Roja sensibiliza en Galicia sobre 300.000 niñas y niños soldado

SANTIAGO

Comienza en Santiago, Pontevedra, Ourense y Lugo. Muestra imágenes de jóvenes a tamaño real portando fusiles, y aporta además videoforums, charlas y folletos explicativos

12 feb 2014 . Actualizado a las 15:16 h.

«Uns 300.000 nenos e nenas dende os 7 ata os 18 anos de idade están participando actualmente en 30 conflitos armados en máis de 17 países de todo o mundo», destacan los materiales utilizados por Cruz Roja para iniciar una campaña de sensibilización sobre las niñas y niños soldado en el mundo. La actividad se presentó a mediodía, en el Museo Pedagóxico de Galicia, para conmemorar el Día Internacional contra la Utilización de los Niños y Niñas Soldado. Las sedes de la Cruz Roja de Santiago y Pontevedra, el colegio Portovello de Ourense, y la Casa da Xuventude de Lugo serán los primeros locales de Galicia donde se ofrezcan los elementos de la campaña: imágenes impactantes de jóvenes a tamaño real portando fusiles y otro tipo de armamento, además de aportar videoforums, folletos explicativos y charlas. La campaña visitará en los próximos meses diversos centros cívicos, facultades y colegios no universitarios, y tiene como lema La guerra no es un juego.

En la presentación participaron Carmen Colmeiro, presidenta autonómica de Cruz Roja, quien resaltó que esta actividad se integra en las conmemoraciones del 150 aniversario de la entidad. Intervino además Ovidio Rodeiro, director xeral de Xuventude de la Xunta, quien enfatizó el «acerto» de esta iniciativa de sensibilización. Y Jessica Núñez Rego, coordinadora autonómica de Cruz Roja Juventud en Galicia, que se amparó en datos de Naciones Unidas para indicar que el 40 % del colectivo de menores soldado son niñas, obligadas a ejercer en tareas de guerra durante el día y que son explotadas sexualmente por la noche.

Cruz Roja afirma que estas niñas y niños soldados se utilizan «como espías, mensajeros, combatientes con armas, esclavos sexuales, sirvientes y cocineros siendo una de las misiones que les suelen encomendar la de colocar y retirar minas antipersona. Sus derechos están siendo vulnerados sistemáticamente y son miles los que mueren, quedan mutilados o con heridas graves y, por otra parte, traumatizados y marcados psicológicamente por las experiencias que tienen que vivir». La campaña pretende «informar acerca de las consecuencias que tienen los conflictos armados sobre la infancia y promover la educación para la paz y la tolerancia».