Espadas sobre los encargos de Conde Roa a Currás: «Con lo acojonado que es, se echa atrás»

La Voz

SANTIAGO

09 feb 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Lo que opinaban de Gerardo Conde Roa y Ángel Currás, su sucesor en la alcaldía de Santiago, Paula Prado y Ángel Espadas tiene un gran valor en la investigación del caso Pokémon porque eran dos personas claves en el organigrama municipal. La actual portavoz del PPdeG y diputada autonómica era portavoz local y la conexión del gobierno local con la Xunta. Espadas era un peso pesado del partido en la ciudad, además de jefe de gabinete y mano derecha de Conde Roa.

Ambos sabían bien de lo que hablaban cuando comentaban por teléfono el 18 de abril del 2012, dos días después del anuncio de dimisión de Conde Roa, que el que había sido alcalde había dejado «encargos» a su sucesor: aprobar el oscuro convenio urbanístico de la Finca do Espiño y la leonina ampliación del contrato del servicio de aguas a Aquagest.

Prado y Espadas creían que eran asuntos turbios, «compromisos» que había adquirido Conde Roa y que tenía máximo interés en que saliesen adelante cuando él ya no estuviese en Raxoi, de ahí que presionara para que Currás fuese su sucesor en la creencia de que él los sacaría adelante por lealtad. Ambos creían que no sería así y que, por ser tan «dubitativo» no se «mojaría» por nadie si veía dificultades.

Ángel Espadas. El problema va a ser cuando los objetivos que tiene que cumplir no los cumpla, Paula, porque esto es un tema de supervivencia de alguno.

Paula Prado. (Risas).

Á. E. Y yo creo que, a ver, él con todos sus defectos, que tiene muchos y con todo lo hijo de puta que puede ser en ocasiones y sibilino, no es un chorizo.

P. P. A lo mejor no es un chorizo para él (...). Pero se comprometió a cerrar algún tema.

Á. E. Sí, pero cuando llegue la hora de la verdad, yo te digo que con lo timorato que es, lo acojonado que es, la más mínima duda que le surja (...) el tío se echa atrás, el tío se echa atrás. Yo estoy convencido de que el tío me va a llamar para preguntarme por la Finca do Espiño, ¿eh?, convencido.

No se equivocaron en sus predicciones sobre Ángel Currás. El convenio de la Finca do Espiño fue firmado por Conde Roa, pero jamás llegó al pleno para su ratificación y de la ampliación del contrato a Aquagest no se ha vuelto a hablar.