La adjudicataria también perdió contratos en Cataluña tras la investigación

La Voz

SANTIAGO

15 dic 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

La operación Pokémon que Pilar de Lara dirige desde el Juzgado de Instrucción número 1 de Lugo ha arrastrado a GRS Arc Local y enviado al paro a varias decenas de trabajadores. El contrato de la gestión de multas del Concello de Santiago, tramitado en la etapa del dimitido Albino Vázquez en el departamento municipal de Tráfico, forma parte de una de las piezas separadas del caso por presunta «ilícita adjudicación».

La investigación apunta a la amistad del administrador de GRS, Alexandre Ros, y el exjefe de gabinete de Gerardo Conde Roa en la Alcaldía, Ángel Espadas, por lo que la empresa catalana habría sido favorecida en el concurso. En Cataluña, entre otros contratos, GRS Arc Local gestionaba los tributos de los ayuntamientos de la comarca de la Selva, trabajo que también perdió tras el estallido de la operación Pokémon-Manga.