Unas cien personas reivindicaron en Arzúa la traza actual del Camino Norte

Natalia Rodríguez Noguerol
n. noguerol ARZÚA / LA VOZ

SANTIAGO

NOGUEROL

La protesta contra la vía histórica reunió a afectados de varios concellos

20 oct 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Un centenar de personas se concentraron ayer en Arzúa para dejar constancia de su «absoluto rexeitamento» a la modificación del trazado principal del Camino Norte, que, de acuerdo con la propuesta de delimitación presentada por la Consellería de Cultura, no llegará hasta el casco urbano, donde actualmente se cruza con el Camino Francés.

El desacuerdo con la catalogada como vía histórica en el expediente que está en fase de exposición pública quedó patente en un manifiesto a través del que se instó a la Xunta «a que dedique os poucos recursos dos que poida dispor a Consellería de Cultura a potenciar as infraestruturas do Camiño que deseñou no 1992», en lugar de dar prioridad a una alternativa «baseándose nun novo e custoso traballo de investigación que non aporta probas de peso que xustifiquen semellante modificación».

La lectura del manifiesto en la plaza principal de Arzúa fue el colofón de un acto en el que también participaron afectados de Sobrado, Guitiriz, Friol, Mondoñedo y Baamonde, donde por la tarde se celebró una manifestación más numerosa para reivindicar también la permanencia de la traza actual.

La protesta callejera en Arzúa, que arrancó con una marcha por el tramo urbano del Camino Norte hasta el albergue de peregrinos, no contó con tanto respaldo, pero sí colmó las expectativas de la asociación local de hostelería, de la que partió el llamamiento días atrás. Esa circunstancia ha sido valorada desde el colectivo por Raquel Carregal. «Para ser una marcha convocada con pocos días de antelación y teniendo en cuenta el mal tiempo, sí estamos satisfechos», afirmó Carregal, que admitió que «no se ven muchos vecinos», pero sí «mucha gente de colectivos afectados» y no solo hosteleros.

Quienes sí secundaron la protesta fueron el regidor, José Luis García López (BNG), y su primera teniente de alcalde, María del Carmen Torreiro, así como los portavoces de los dos grupos en la oposición municipal: Antonio Orois, del PP, y Begoña Balado, del PSdeG. Y será precisamente el Concello el organismo desde el que se presenten de forma conjunta con los colectivos afectados las alegaciones a la propuesta de delimitación del Camino Norte.