El Concello tira 72.000 euros en remiendos que se levantan

nacho mirás SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

XOÁN A. SOLER

El nuevo asfalto queda mal compactado y no se adhiere a los baches

19 may 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

El remedio va camino de ser peor que la enfermedad. Los resultados de la campaña de bacheo iniciada por el Concello de Santiago dejan tanto que desear que, al menos, los agujeros como estaban antes salían más baratos.

Basta darse una vuelta por la ciudad para sostener, con imágenes y argumentos, la afirmación del párrafo anterior. Lo primero que llama la atención de este parcheado deficiente es el relieve que ha provocado en numerosas vías. El conglomerado se vierte directamente desde un camión y, aunque en los baches más grandes se utiliza una pequeña apisonadora para compactarlo, lo que resulta es una especie de costra negra elevada un par de centímetros sobre el firme original: un desastre.

El material que se está utilizando, además, ni siquiera es compatible con el que ya estaba instalado en el color. Pero lo peor no es la imagen de calle patchwork que queda, sino la pésima adherencia y la nula resistencia del remiendo, tal y como se puede apreciar en las imágenes que ilustran esta página.

Lo peor

Descuidando por completo el firme de piedra y chapacuña de algunas zonas -caso de Carretas o Castrón D?Ouro-, los operarios dispersan asfalto mezclado con gravilla a diestro y siniestro sobre los agujeros del empedrado y ni siquiera se detienen cuando se encuentran con señalización horizontal, caso del paso de peatones en Carretas que se puede ver a la derecha.

Uno lo los ejemplos más bochornosos es la reparación del boquete que había frente a la sucursal de Novacaixagalicia en Basquiños: El agujero se tapó y, a las pocas horas, aparecía en la capa de asfalto una nueva fochanca con la misma profundidad que su antecesor, solo que con los bordes más redondeados. Si uno mete los pies dentro, el agua le cubrirá por encima de los zapatos. Meta ahora la rueda de un coche, o lo que es peor, de una moto, y si sale entero, no deje de celebrarlo. La calle Diego Bernal, la rúa da Estrada, Sar... una calamidad. Y habrá que pagar dos veces.