La fuga de aerolíneas retraerá al aeropuerto a cifras del 2007

x.m.c. santiago / la voz

SANTIAGO

Volotea se marcha de Lavacolla, por lo que se pierden vuelos a Venecia, Ibiza o Menorca.
Volotea se marcha de Lavacolla, por lo que se pierden vuelos a Venecia, Ibiza o Menorca. á. ballesteros< / span>

A los recortes de Ryanair y la salida de Air Berlin se suma la de Volotea

19 dic 2012 . Actualizado a las 15:52 h.

Ni Santiago ni Vigo entran en los planes de Volotea para el próximo verano. La compañía de Carlos Muñoz y Lázaro Ros apostó decididamente por Galicia, pero su compromiso ha ido perdiendo fuelle. Tenía previsto operar en Lavacolla este invierno, pero mudó de estrategia y no lo hizo.

Con esta decisión se perdieron los vuelos directos de Ibiza, Menorca y Venecia. Los usuarios de la conexión con la ciudad italiana tenían la creencia de que en verano la empresa reanudaría sus enlaces. Pero los directivos de Volotea acaban de sacarlos de dudas. El año que viene los viajeros entre Venecia y Compostela habrán de recurrir a otras opciones.

No es que la compañía de bajo coste sea una panacea para Lavacolla, ya que durante este año movió un tráfico de 19.400 pasajeros, pero refleja la realidad de que hay aerolíneas que miran hacia otras opciones y reducen el movimiento de Lavacolla. Acaba de suceder con Air Berlin, que de repente dio un giro en sus estrategias y dejará de aparecer por Compostela tras hacerlo durante seis años consecutivos.

Aparte de desconectar Compostela con varias urbes alemanas, a través de Palma, la marcha de la operadora germana rebaja en unos 120.000 los pasajeros de llegada y salida de Lavacolla, a tenor de los datos del presente año. El bajo coste está dando sucesivos disgustos.

Y uno más es la reducción de las frecuencias de Ryanair entre Santiago y las dos ciudades más importantes de España a partir del próximo verano. Las tasas tiene la culpa de esta eliminación de asientos, según alegó la compañía, a la espera de lo que ocurra en el 2014 cuando caduque el convenio con la Xunta. Entretanto, las estimaciones indican que las restricciones del 2013 afectan en torno a cien mil pasajeros.

La eliminación de tráfico traerá como contrapartida nuevas incorporaciones, como los vuelos a Londres y Basilea de Easyjet o la apertura de la ruta hacia tierra turcas a través de Turkish Airlines, que iniciará este verano sus vuelos a Lavacolla. Aunque actúan de contrapeso, aportarán en torno a 50.000 pasajeros a lo sumo.

Pérdidas

Por contra, los cálculos indican que las pérdidas de las rutas y frecuencias veraniegas elevarán a más de 200.000 los asientos que dejarán de calentarse a partir del próximo verano. De ser así, la línea anual de dos millones de viajeros se verá traspasada de nuevo, pero en retroceso.

Al menos, la evidencia muestra que existe ese peligro de involución, ya que aparte de la posibilidad de que otras líneas levanten el vuelo hacia otros aeropuertos, la tónica descendente en Lavacolla parece imparable. Son ochos meses consecutivos de descenso acumulado, sin medidas que taponen la sangría.

Este año se ha trasvasado ya la frontera de los dos millones y al final del 2012 el número de pasajeros se acercará a los 2.200.000.