El futbolista de Teo afronta su primera temporada en el Maccabi
10 dic 2012 . Actualizado a las 21:36 h.El fútbol gallego exporta talento desde hace años. Un ejemplo de ello es Gonzalo García, un joven nacido en Uruguay pero afincado en Teo desde la infancia. Tras pasar por la liga holandesa y dar el salto en el 2011 al fútbol chipriota, llegó en esta temporada a Israel, avalado por Jordi Cruyff, director deportivo del Maccabi. Desde lo alto de la tabla analiza la temporada y los sobresaltos sufridos en los últimos meses ante la escalada de tensión en Oriente Medio.
-¿Se ve peor el conflicto desde fuera de Israel?
-Lo cierto es que aquí se vive de forma diferente. En Tel Aviv, y a excepción de lo ocurrido en los últimos meses, no se siente que haya una guerra. Creo que hacía casi 20 años que en la ciudad no sonaban las sirenas. Esto no es igual a otras zonas del país, como las del sur, aquí te sientes más seguro. De todas formas, es cierto que en noviembre, cuando hubo misiles que alcanzaron esta área, aumentó la preocupación.
-¿Llegó a pasar miedo en algún entrenamiento cuando empezaron a sonar las sirenas?
-Miedo no tuve porque el gobierno israelí tiene uno de los mejores sistemas defensivos del mundo y es muy difícil que llegue a impactar un misil. En ese caso, y cuando suenan las alarmas, aligeras el paso hacia los vestuarios al no haber búnkeres en la ciudad deportiva, algo que sí tienen todas las viviendas. De todas formas, te sientes fuera de lugar. Te preguntas qué está pasando. Es surrealista tener que ponerte a cubierto...
Reconozco que cuando sí me puse nervioso fue tras una explosión en un autobús de Tel Aviv. Fue cerca de mi casa y se escuchó perfectamente.
-Esta escalada bélica no llegó a parar la liga. ¿Se busca dar sensación de tranquilidad?
-Creo que sí. Durante los momentos de mayor tensión tan solo se pararon dos partidos. En nuestro caso, y diez minutos antes de que arrancase un encuentro, empezaron a sonar las alarmas y tuvimos que volver a los vestuarios. Pero diez minutos más tarde nos obligaron a volver a saltar al campo. La federación no se planteó suspenderlo porque somos el Maccabi. ¿Pero a quién le gusta tener que jugar un partido mirando al cielo?
-A nivel deportivo, la temporada arrancó con éxito...
-Deportivamente la temporada está encarrilada, somos los primeros. A nivel personal me encuentro bien aunque no es sencillo acostumbrarse al fútbol israelí. Mi estilo no se ajusta demasiado porque, en general, el juego aquí es menos táctico.
-¿Cómo se adaptó a Tel Aviv?
-La verdad es que me siento cómodo. Es un sitio especial y precioso. Siempre hay cosas que hacer, tiene mucha vida, hay gente joven por las calles, las terrazas están llenas... Es una de las ciudades más europeas de Israel. Aún así, la vida es diferente, sobre todo, por la forma de pensar. Pero más allá de eso, se puede disfrutar de la vida.
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