Miles de personas se dan un baño de cultura gallega

alejandro mosteiro SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

Gonzalo Iglesias

26 jul 2012 . Actualizado a las 11:40 h.

El campus sur de la Universidade vivió ayer una jornada de fiesta. Miles de personas llegadas desde todos los puntos de Galicia y de fuera de la comunidad se dieron un auténtico baño de cultura gallega, gente como Álvaro Lores, que repite cada año en el Festigal porque «gústame verme nos nenos e nos galegos e celebrar o Día de Galicia con eles».

Las gaitas, las panderetas y las regueifas inundaron el césped abarrotado, en el que las familias comieron, bebieron, bailaron y cantaron para festejar por todo lo alto el Día del Galicia. Niños y mayores disfrutaron de una potente oferta cultural y lúdica en una tarde de calor en la que la escasa lluvia no pudo aguar la fiesta.

La literatura, con presentaciones como las de Neira Vilas y Camilo Nogueira, los debates sobre las libertades democráticas y la música de bandas como Sés o De Outra Margem protagonizaron la clausura de una nueva edición de este evento, con la que el director de Galiza Sempre, Xabier Macías, se mostró una vez más «moi contento e satisfeito».

El recinto del festival se convirtió en un punto de encuentro para la gente que viajó a Compostela con motivo de las manifestaciones nacionalistas, un empujón importante para el Festigal, que llegó a superar el número de visitantes de años pasados, según la organización.

A pesar de la gran afluencia de personas, el consumo se redujo mucho en comparación con ediciones anteriores. La culpa de ello, como de casi todo, la tiene la crisis. «Se habitualmente damos de comer a 1.500 persoas este ano só servimos a 700», aseguró uno de los pulpeiros que acude cada año a esta cita, ya que mucha gente optó por llevar su comida y disfrutar de la fiesta con menos gasto.