Fonseca recupera a los aviadores de la República

lois pereira SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

04 nov 2011 . Actualizado a las 11:52 h.

La de 1936 fue una guerra cruenta: matar o morir. Una exposición en el Pazo de Fonseca recupera la historia de La Gloriosa, la aviación republicana que luchó con material destartalado de la Primera Guerra Mundial contra la temible Luftwaffe, que impuso la fuerza bruta frente al voluntarismo republicano. Eran 1.082 integrantes -de ellos más de cien gallegos- entre pilotos, observadores, ametralladores, fotógrafos, armeros, mecánicos, soldados, especialistas y administrativos.

Una exposición abierta ayer en Fonseca repasa la trayectoria de este colectivo en treinta paneles informativos, un vídeo y diferentes vitrinas con objetos de la época cedidos por los propios aviadores.

Para el comisario-coordinador de la muestra, Roberto Pando Rozada, esta «refleja tanto la aportación a la contienda de los aviadores republicanos como los lazos de fraternidad que establecieron y que, posteriormente, les sirvió para que se reconociesen sus derechos como aviadores militares profesionales en la democracia».

La exposición Aviadores de la República está promovida por el Ateneo de Santiago, la Fundación Aena, la Universidad de Santiago y la Asociación de Aviadores de la República que, de esta manera, ven recuperada su memoria histórica y reciben un merecido homenaje.

Así lo reconoció expresamente el presidente del Ateneo santiagués, el poeta Salvador García Bodaño, quien glosó las peripecias aviadoras del poeta Rafael Alberti y los versos de Miguel Hernández: «Cruza una gran tormenta de aeroplanos y anhelos», recordó García Bodaño en el acto de inauguración.

Esta muestra estará abierta hasta el día 30 de este mes en horario de lunes a sábado de 11 a 14 y de 17 a 23.30 horas.