El Ciudad buscará un nuevo ascenso el próximo año

Francisco Balado Fontenla
fran balado SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

12 may 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

El Ciudad de Santiago tiene menos de un año de vida pero ya se ha convertido en el referente de la natación en Compostela. La directiva está formada por un grupo de padres que le dedican horas de forma desinteresada a la consolidación de un proyecto en el que, hasta el momento, cuentan con muy pocos apoyos.

El equipo lo integran un total de 80 chavales, desde los niños que están aprendiendo a dar sus primeras brazadas, como los benjamines, hasta jóvenes universitarios que compaginan los estudios con la práctica de la natación.

El ferrolano José Rioseco es uno de los grandes referentes de la natación en Galicia. Lleva toda una vida dedicada a este deporte. Ha entrenado a primeros espadas del triatlón mundial, como Iván Raña o Javier Gómez Noya, y fue miembro de la Real Federación Española de Natación. A finales del pasado año recibió y aceptó una oferta de la directiva del Ciudad de Santiago para cambiar Ferrol por la capital de Galicia. Le encomendaron una tarea complicada: crear un equipo desde cero con un presupuesto muy ajustado. Las subvenciones de las entidades deportivas de este nivel no se otorgan hasta que cumplen un año, por lo que las cuotas de los socios es casi la única fuente de ingresos que tiene este club.

La clave del proyecto

José Rioseco es la piedra angular del proyecto, aunque su cargo oficial es el de director técnico. Compagina las labores de despacho con el trabajo de campo, ya que de lunes a viernes, desde las 16 hasta las 21.30, se pone el bañador y las chanclas para ayudar a mejorar la técnica de nado de sus pupilos.

El pasado fin de semana el club logró el ascenso de categoría, por lo que el año que viene competirá en Segunda División. Vencieron en 28 de las 38 pruebas que se disputaron en Santa Isabel. «Era nuestra obligación. Tengo chavales que tienen muy buenas marcas y lo cierto es que sería una sorpresa que no hubiésemos ascendido», asegura Rioseco.

A la hora de fijarse objetivos, el director deportivo apunta alto: «Si las cosas van normal y soy capaz de mantenerlos motivados tres o cuatro años más, podemos alcanzar un nivel bastante más alto. Una ciudad como Santiago se merece disponer de un equipo en una categoría mayor».

Limitaciones

Rioseco habla de tres limitaciones a la hora de intentar lograr las metas. «Una es la económica, aunque si todo va bien el año que viene recibiremos la subvención. Es el mínimo para intentar ser competitivo. Otra es el espacio. A partir de las 19.00 solo disponemos de dos calles para entrenar, y somos treinta y tantos», afirma el ferrolano. «Por último, el número de chavales. Queremos llegar a 120. Es el mínimo para ser competitivos».

Rioseco invita a los chavales a que se animen: «Tengo la sensación de que el futuro de esta sociedad pasa por que todo el mundo esté mucho más tiempo en el agua. El agua es salud».