Robert Joseph es uno de los veteranos ilustres de la LEB Oro y uno de los jugadores con más peso en el conjunto navarro. El pívot de origen haitiano espera un partido de corte defensivo, porque ese es el rasgo por el que más se significan los dos contendientes. «Quizás ellos tengan más calidad y más experiencia, pero se va a ver una gran pelea», apunta.
En la línea que sugiere su entrenador, el pívot asegura que no habrá atención especial a algún jugador obradoirista: «A nosotros lo que nos preocupa, cualquiera que sea el rival, es nuestro baloncesto. Si hacemos bien nuestro trabajo nadie nos podrá decir nada, pase lo que pase».
Robert Joseph advierte de que el rendimiento del Navarra es más elevado cuando juega ante su público: «En casa salimos más fuertes y no sé muy bien por qué. Quizás porque hay mucha gente que es de aquí, y por el apoyo de nuestro público».
Si el baloncesto fuese como las matemática, y después de que en el partido de ida el Navarra solo cediese en los últimos cuatro minutos, los pronósticos apuntarían al conjunto de González Jareño, por aquello de su fortaleza como local. Pero Joseph avisa de que «cada partido es diferente. Este es un deporte muy cambiante y hay cosas distintas en los dos equipos».
El pívot vive el día a día muy pendiente de lo que sucede en su país, Haití, y no oculta su inquietud. Un año después del terremoto, «la situación allí sigue siendo fatal. Hablar de eso requeriría muchas horas».