El pacto para la estación del AVE depende ya de una decisión política

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Bugallo y el presidente del ente ferroviario mantendrán una reunión este mes, «a ver se arrancamos»

09 dic 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

El 2010 concluirá sin que el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) haya licitado la redacción del proyecto para la construcción de la estación del AVE. Y es que ambos organismos todavía no han llegado a un punto de acuerdo. Sus técnicos han evaluado recientemente la última propuesta del ADIF -trasladar la estación 60 metros a la derecha, hacia Pontepedriña, frente a la idea inicial de mantenerla donde está la actual- pero sin lograr ningún avance. Porque el entendimiento parece trascender ya cualquier cuestión técnica, lo que sitúa una solución en un ámbito más político.

Así lo considera el Ayuntamiento, toda vez que la propuesta del desplazamiento del futuro edificio condicionará a la baja las posibilidades del aprovechamiento urbanístico lucrativo del área ferroviaria a favor del ADIF, además de no concretar cuestiones esenciales para la movilidad futura en la zona. Y Raxoi demanda aclarar ambas para cerrar un acuerdo que ya se pretendía sellar este año. El regidor, Sánchez Bugallo, no quiere que el proyecto hipoteque la posibilidad de conectar el Hórreo con Clara Campoamor por debajo de las vías, aunque ese enlace no se asuma de momento.

Y con la propuesta del ADIF no queda prevista, como tampoco la conexión directa de la estación del AVE con la futura terminal de autobuses, que se instalará en ese ámbito. El desplazamiento de la estación del AVE obligaría a reajustar la del transporte por carretera para garantizar su conexión directa. Que ambos edificios queden pegados no es suficiente para el alcalde: «Hai que garantir que os usuarios non teñan que saír ao exterior para pasar dun a outro».

Raxoi también quiere que el ADIF tenga claro que con su última propuesta el Concello no puede garantizar «que se poida manter» la totalidad de la edificabilidad» prevista hasta ahora y que ha de financiar parte de la nueva estación. Con la anterior propuesta, la edificabilidad máxima sobre la que se articularía el acuerdo «encaixaba dunha maneira, pero así non nos dá».

El volumen de edificabilidad lucrativa fue el principal caballo de batalla en el largo proceso negociador que han mantenido ADIF y Concello. Nada menos que seis años llevan ambos organismos intentando un acuerdo que en el 2010 parecía cercano, hasta que el primero lanzó a mediados del ejercicio la propuesta de desplazar la terminal aduciendo cuestiones técnicas. Todas las estaciones se sitúan al principio del andén, no en medio, como la propuesta inicial.

Un ámbito «moi sensible»

Santiago no tiene inconveniente para aceptar ese cambio, que abriría la posibilidad de poder conservar la actual estación, pero sí advierte que el aprovechamiento urbanístico se verá condicionado en varios miles de metros cuadrados. Y esa es una cuestión que el ADIF deberá tener muy en cuenta, porque afectará a sus posibilidades de financiación. Y el Concello no está dispuesto a admitir soluciones compensatorias que eleven el impacto constructivo previsto hasta ahora para una zona «moi sensible para a cidade», afirma Bugallo, quien antes de que concluya este mes mantendrá una nueva reunión con el presidente del ADIF.

El regidor confía en que en ese encuentro se enfile una solución. «A ver se somos capaces de arrancar con este tema», dice, aunque dejando claro que si bien Raxoi quiere facilitar la nueva estación también hay límites que «non estamos dispostos a traspasar», y en el actual contexto «non garantimos que se poida facer o alí previsto» en cuanto al aprovechamiento urbanístico estimado. Y dado que «chegados a este punto» los técnicos «non poden tomar unha decisión, esta debe ser política».