El primer incendio grave del verano en Negreira casi iguala al histórico del 2006
SANTIAGO
Abriendo informativos de televisión a nivel nacional. Así se encontraron el sábado los habitantes de Porqueira o Romarís, en la zona alta de Negreira, con un panorama dantesco en el primer gran incendio del verano en Galicia: 519 hectáreas arrasadas en un solo día. Un título que a los lugareños no les gusta nada: «É certo que facía vento e dificultaba o traballo, pero nós nunca pensamos que o lume ía chegar tan preto das casas con tantos medios como había xa pola mañá», sobre todo aéreos con hasta cinco hidroaviones y seis helicópteros.
Ayer en la zona solo quedaban cuadrillas de retén con motobombas para enfriar la zona, puesto que el incendio quedó controlado sobre las diez de la noche del sábado, aunque en la tarde del domingo se reprodujese un pequeño foco cerca del núcleo de Pedralonga, al lado de donde se inició.
Entre tanto monte arrasado, el alcalde negreirés, el socialista Jorge Tuñas Caamaño, destacó que no hay infraestructuras como el alumbrado público o líneas eléctricas dañadas. «Temos que facer un balance minucioso dos danos, e se vemos que podemos pedir á Xunta axudas ou compensación para paliar as perdas que sufriron os veciños, farémolo», dice el regidor.
Tuñas cree que todas las administraciones deben centrar sus esfuerzos en prevenir durante el invierno: «O Concello agradece tanto á Xunta como ao Goberno central toda a súa axuda pero temos que traballar en limpeza de montes e cortalumes para que este tipo de desastres medioambientais non se volvan repetir», aclara.
Los vecinos de Xallas, Romarís o Porqueira aún recuerdan que hace cuatro años por las mismas fechas (12 y 13 de agosto) hubo un incendio que se inició tras calcinarse un coche robado que fue abandonado en el parque eólico. Aquel fue más grande, unas ochocientas hectáreas, ya que llegó hasta el vecino municipio de Outes.