El club Atlética Silva, que tiene su sede a mitad de camino entre Cerceda y Ordes, en el primero de los municipios, se erige como una especie de reserva del atletismo, como una entidad en la que tienen cabida cerca de un centenar de deportistas de edades comprendidas entre los siete y los que ya pueden presumir de sexagenarios.
El nexo común, el que une a los más jóvenes, los de más edad y los sectores intermedios, es el gusto por el atletismo y sus distintas disciplinas. No obstante, en el capítulo de las mejores marcas sobresalen los lanzadores de jabalina y martillo. Con mención especial para Ana Domínguez, que a sus quince años ya se codea con las mejores especialistas sénior de jabalina. No en vano, ha fichado por el Playas de Jandía, aunque sigue ejercitándose la mayor parte del curso en el Club A Silva.
También sobresalen los velocistas, como Roberto Faya, que a sus 35 años tiene el récord gallego absoluto de cuatrocientos y sesenta metros lisos, amén de la segunda mejor marca española de máster 35 en el 400.
Otro de los destacados es el presidente, Pepe Domínguez, de alguna manera el que prendió la mecha de lo que hoy es la Atlética Silva. Es profesor en el colegio Celso Emilio Ferreiro y ahí empezó hace un par de lustros la aventura del club, que no ha parado de crecer.
El próximo fin de semana, A Silva estará presente en el Campeonato de España juvenil, y en el de Clubes Veteranos, aunque en este caso solo las féminas, ya que es obligado tener representación en todas las pruebas y las chicas consiguieron superar todas las mínimas. El 27 llegará el turno del Campeonato Gallego de Veteranos y en julio el de España, que se celebrará en Vitoria. Son las citas más inmediatas en un calendario que no para.