Fariña insistió ayer en justificar, sobre todo ante el rechazo de la oposición, la subida del IPC para las tasas (salvo la de limpieza) y el impuesto de vehículos (los demás se congelan). Dice el concejal que el encarecimiento de los servicios también repercute en los costes que tiene que asumir el Ayuntamiento.
En cualquier caso, los compostelanos verán como el abastecimiento de agua, saneamiento y depuración, el servicio de extinción de incendios, de cementerio, la celebración de bodas en el Concello o el impuesto de vehículos se encarecerán casi un 5% en el 2009. Tampoco los servicios de la grúa y la ORA se escapan. En concreto, en esta última, los 120 minutos máximos que hasta ahora se contratan por un euro en las zonas de régimen general pasarán a ser 115.
El Concello ingresa anualmente unos 20 millones de euros por tasas (no impuestos), sin contar las propias de licencia urbanística. Estas dependen del número de solicitudes pero este año se preveían 6,4 millones por ello.