El pleno coincide en la necesidad de apurar las obras de la guardería, que arrastran meses de retraso

U.L.

SANTIAGO

07 oct 2007 . Actualizado a las 02:00 h.

La obra del denominado edificio multiusos y guardería del municipio de Rois arrastra un retraso considerable, de modo que el pleno autorizó ayer dar una segunda prórroga a la empresa constructora, que deberá cumplir el contrato firmado antes del 30 de noviembre. El primer plazo para la conclusión de los trabajos estaba fijado para abril, pero hubo una primera prórroga que lo amplió hasta agosto y que no se cumplió.

De este tema se habló y bastante en el pleno ordinario celebrado ayer por la corporación del Concello, en el que los tres grupos políticos coincidieron en que «hai que darlle ritmo» a la ejecución del edificio, en primer lugar para no perder las subvenciones públicas que tiene concedidas. Pero el retraso es tal que, por ejemplo, la portavoz del PSOE María Jesús Castro Neo ya habló de pedir una «compensación» a la empresa por la demora mientras que el alcalde, Ramón Tojo (PP), declaró abiertamente que «o concello estase a ver perxudicado pola actitude da empresa».

Previamente a este punto, el pleno aprobó la revisión anual del padrón de habitantes que, a fecha de 1 de enero de 2007, es de 5.034 habitantes. Los tres grupos políticos dieron la voz de alarma porque, como dijo Castro Neo, «estamos a punto de entrar en números vermellos», en alusión a no superar la barrera de los 5.000 vecinos.

Bajada de categoría

El actual gobierno acusó al anterior de no ser capaz de captar población pese a sus continuos anuncios de que así sería ya que, durante 2006, el censo de Rois perdió 70 ciudadanos. A nadie se le escapó, además, el hecho de que quedar por debajo de los 5.000 habitantes supone «baixar de categoría», en palabras del concejal socialista José Manuel Iglesias Pérez, y con ello menor número de representantes políticos pero también de subvenciones económicas.

Por lo demás, el pleno trató varios puntos relacionados con caminos y proyectos municipales de obras, que lograron el apoyo unánime de todos los concejales. Asimismo, dejó decididos los días festivos locales para el próximo año, que se repiten: Lunes de Pascua (24 de marzo) y San Isidro (15 de mayo).

Además, los ediles renunciaron a cobrar la asistencia al pleno para destinar el dinero a ayudar a una familia de la aldea de Bralo, que perdió su vivienda en un incendio ocurrido en agosto. El Concello tiene abierta una cuenta para todos los que quieran prestar su ayuda.