Los huesos de los años oscuros

Natalia Rodríguez Noguerol
Natalia Noguerol SANTIAGO / LA VOZ

SANTIAGO

ÁLVARO BALLESTEROS

Descubren en una fosa común localizada en O Amenal, en O Pino, los cadáveres de tres de los once vecinos de Boimorto asesinados durante la Guerra Civil

31 ago 2022 . Actualizado a las 22:43 h.

La historia, como las verdades, siempre acaba saliendo a la luz. La de Isidro y Andrés Filloi López, Ramón Vázquez Garea, Ramón Sánchez Rapela y Caitán das Quintas lo hace setenta y un años después de que hubiesen sido asesinados por mano de los fascistas que se sublevaron en contra de la República democrática en julio de 1936. A cualquiera de esos cinco vecinos de Boimorto podrían pertenecer los restos de los tres cadáveres que se hallaron en una fosa común localizada en el lugar de O Amenal, en el municipio de O Pino. En una zona arbolada a la que la barbarie allí cometida dejó el nombre de A chousa dos mortos trabajan desde el martes arqueólogos de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica. Su tarea es rescatar los cuerpos de cinco de las once personas que, en Boimorto, fueron víctimas de la represión transcurrido un mes del levantamiento militar que originó la Guerra Civil. Los trabajos se centraron durante la jornada de ayer en la limpieza de la fosa en la que se localizaron, tal y como estaba previsto, tres de los cuerpos. «Están bastante ben conservados», cuenta Xosé Luis Rivas Cruz, concejal de Boimorto que propuso al Concello rescatar del silencio la memoria de los once vecinos asesinados, de los que nueve eran miembros de la corporación municipal de entonces. Rivas Cruz explica que se trata de un proceso «lento e laborioso» que se prolongará, «se todo vai ben», unos días más. En la fosa localizada en O Amenal se trabaja con la rigurosidad que exige toda prospección arqueológica. Por ello, el equipo de profesionales al que se le ha encomendado la labor se centra en la limpieza de la fosa antes de proceder a la exhumación individualizada de los esqueletos. Sólo así se garantizará una correcta identificación de los cuerpos. Será en la Universidad del País Vasco. Hasta entonces, todavía restan varias jornadas en O Amenal, en donde los próximos días se realizarán catas para tratar de localizar una segunda fosa, de la que se esperan recuperar los cuerpos de otros dos represaliados. Entretanto, los trabajos despiertan la curiosidad de numerosos vecinos del lugar, que los presencian con «profundísimo respeto», cuenta Rivas Cruz.